Neicary Albarrán / Una de las principales mensajeras de un presunto antisocial tras las rejas en la comunidad de Rio Claro al sur de Barquisimeto, alias ‘David EL Fresa’ conocido como El Hacker de los dólares, cayó detenida luego de que funcionarios del Comando Nacional Antiextorsión y Secuestro Conas- Lara diera con su ubicación tras estafar a unos ciudadanos en una venta engañosa de dólares.
Se trata de la pareja del hoy privado de libertad, identificada como Carmen Emilia González Armas.
Según fuentes militares en el procedimiento, la ahora aprehendida ubico a sus víctimas a través de la aplicación telefónica WhatsApp y les ofreció venderle 300 dólares en efectivo. Los agraviados no quisieron perder la oferta y aceptaron trasfiriendo a una cuenta bancaria la cantidad de 690.000 Bs S el pasado viernes 08 de febrero.
La dama desapareció y no entrego los billetes extranjeros, acción que llevo a las víctimas a acudir el mismo día a la sede del Conas Lara para efectuar la denuncia. Los efectivos militares iniciaron las labores de inteligencia y mediante análisis telefónico lograron localizar a la ciudadana.
En las trampas de ‘David El Fresa’ varias personas han caído. Pues el detenido tiene acceso a teléfonos celulares a través de la complicidad con los funcionarios en el pequeño recinto policial.
El malhechor manda a sus aliados afuera a que den cuentas bancarias de locales comerciales como bodegas, mini supermercados y licorerías de modo que cuando los aliados de este lleguen a los establecimientos obtengan productos que supuestamente ellos compraron, sin saber los dueños que el dinero es de alguien estafado.
Alerta en las redes
Funcionarios en el cuerpo de seguridad, informaron que este tipo de delitos conocidos como electrónicos, se presentan con mucha frecuencia en las redes sociales. La mayoría de las veces detrás de estas acciones están los privados de libertad quienes ubican a través de Instagran y Facebook a sus víctimas, hackean sus cuentas en las plataformas y luego le escriben a los familiares de estos ofreciéndoles dinero en dólares.
Para que las personas “caigan” fácilmente en sus juegos, estudian hasta la forma de hablar a través de sus correos y chats, de modo que cuando se dirijan a su nueva “presa” esta crea que habla realmente con la persona que conoce y no con alguien que usurpo su identidad.
Cuando las personas terminan de transferir y piden el dinero comprado a su familiar o amigo cercano este muchas veces no sabía que su cuenta en internet había sido hackeada. Es allí donde los ciudadanos deben denunciar a los organismos competentes y evitar mayores pérdidas.