Una desagradable sorpresa se llevaron los médicos del Hospital Pediátrico Agustín Zubillaga de Barquisimeto, al salir de su turno de trabajo este martes 12 de febrero. En los parabrisas de sus carros, dejaron varias notas amenazantes, señalándolos como responsables por la muerte de niños y jurándole venganza.
«Todas las muertes son y serán su culpa… pagarán cada uno de ustedes de diferentes maneras» se lee en las misivas anónimas, aunque la firman: «los niños».
«Esto es para todos. Médicos, residentes o aprendices» resaltan. Pero además siembran terror en los profesionales de la salud con la advertencia de que conocen sus horarios y días de trabajo.
Les reprochan que saben que hay bacterias y que se mueren niños de diferentes enfermedades y «no hacen nada para que no siga pasando».
Por último, señalan que las advertencias no provienen de una sola persona.