En los actuales momentos se detecta entre muchos trabajadores síntomas de cansancio, agotamiento, fatiga, principalmente de tipo mental, sobre todo entre quienes tienen posiciones o cargos donde la informática, las redes sociales, las comunicaciones y la creatividad, son el grueso de las funciones desempañadas.
Quizá muchos trabajadores vienen dándose cuenta de esto y otros a lo mejor no manifiestan alguno de estos síntomas, o no lo han percibido aunque su productividad ha disminuido. Esto podría ser el Síndrome de Burnout o Síndrome del Quemado, como también se le conoce.
Se trata de un tipo de estrés laboral, un estado de agotamiento físico, emocional o mental que tiene consecuencias en la estima personal, y está caracterizado por un proceso paulatino, por el cual las personas pierden interés en sus tareas diarias, el sentido de responsabilidad y pueden hasta llegar a profundas depresiones.
Y es que el Síndrome de Burnout implica una alteración psicológica ligada al contexto laboral y que puede constituir un trastorno debido a sus efectos dañinos en la calidad de vida. Tal y como veremos, presenta características propias de los trastornos del estado de ánimo (como la depresión) y de los trastornos de ansiedad.
A pesar de que actualmente no aparece en los principales manuales diagnósticos de psicopatologías, cada vez hay más evidencias acerca de las características de este fenómeno, que pueden ser usadas para conocer el perfil propio de esta alteración como una psicopatología separada de la depresión y de otros trastornos.
Este síndrome fue descrito por primera vez a finales de la década de los 60, al comprobar el extraño comportamiento que presentaban algunos oficiales de policía de aquella época.
El psicólogo Elvin López, indica que son varios los elementos que se conjugan para generar Burnout como el clima laboral, y otros que pueden observarse como la estima personal, la satisfacción económica que da el trabajo, las relaciones con los compañeros, la desmotivación que hace que deje de haber placer por hacer el trabajo, las gratificaciones verbales de los jefes de departamento, entre otros.
Es importante que dentro de una organización laboral, existan espacios de recreación que permita mantener buenas relaciones entre los compañeros.
Síntomas principales
Desde los años ochenta, los investigadores no han dejado de interesarse por este fenómeno, pero no es hasta finales de los noventa, cuando existe cierto consenso sobre sus causas y consecuencias.
• Agotamiento emocional: un desgaste profesional que lleva a la persona a un agotamiento psíquico y fisiológico. Aparece una pérdida de energía, fatiga a nivel físico y psíquico. El agotamiento emocional se produce al tener que realizar unas funciones laborales diariamente y permanentemente con personas que hay que atender como objetos de trabajo.
• Despersonalización: se manifiesta en actitudes negativas en relación con los usuarios/clientes, se da un incremento de la irritabilidad, y pérdida de motivación. Por el endurecimiento de las relaciones puede llegar a la deshumanización en el trato.
• Falta de realización personal: disminución de la autoestima personal, frustración de expectativas y manifestaciones de estrés a nivel fisiológico, cognitivo y comportamiento.
López acota que los casos son individuales y que cada persona es única, pero generalmente se realiza un test a los trabajadores por medio de las empresas que buscan asesoría en profesionales de la psicología, se aplica un manual diagnóstico y lo importante es que se haga partícipe a la persona y se aplique a tiempo.
“Es importante evaluar la estima personal para ver su crecimiento personal, que la persona se sienta libre y plena en lo que hace”, destaca el psicólogo.
Julio Urdaneta
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