Anderson Piña Pereira.- “Por lo general yo surto gasolina cada dos días, porque vivo en Cabudare y trabajo en Barquisimeto”, así lo deja saber Yonny Oropeza, conductor de un vehículo Corsa cuatro puertas, mientras hace la cola en la bomba de servicio del Churum Merú.
Relata que siempre tarda entre una hora o dos horas, y a pesar de las largas colas, en la mayoría de la veces se mueve más rápido, que en otras estaciones de servicios.
Él también comenta a EL INFORMADOR que hay estaciones de gasolina donde se puede hablar con el surtidor y se da una colaboración de 2.000 o 1.500 bolívares o en su defecto un kilo de harina, arroz o pasta entre otros artículos de la cesta básica.
Ericka Santana, quien se encontraba surtiendo combustible, asevera que trata de recorrer lo menos que pueda, para tratar de surtir cada cinco días.
“Cada vez que voy a echar gasolina, tengo que hacer la cola mínimo una hora, mientras observo cómo otros llegan y se bajan de la mula y pasan sin hacer la cola”.
Durante un recorrido por algunas estaciones, pudimos conocer el testimonio de un bombero quien señalaba que las colaboraciones también son para ayudar al dueño de la bomba de servicio.
“Nuestro sueldo es lo que cobramos aquí, pero salario y beneficio ya no tenemos”, sostiene.
Además, explica que quienes surten gasolina sin hacer la cola en la mayoría de las veces son funcionarios de la GNB o empresas del Estado.