«Es como más familiar», esa es la percepción que tiene Andrés Peña uno de los miles devotos que acompañó el sábado 12 de abril a la sagrada imagen de la Divina Pastora en su retorno al pueblo de Santa Rosa, después de visitar 69 iglesias en 89 días de peregrinación, esto como parte de su visita 167 a Barquisimeto.
«En el retorno uno puede contemplar a la sagrada imagen, pedirle y venerarla, eso convierte su regresó más especial», relató Peña, quien el pasado 14 de enero la acompañó pero haciendo parte del cordón de protección.
Cecilia Montes, una abuela residente de Duaca, por su parte, dijo que poco la acompaña en su retorno al pueblo de Santa Rosa, debido a que presenta dolores en una de su piernas. Sin embargo, hoy hizo la excepción, y decidió caminarla para entregarla a su hogar y pedir por su salud.
Tras llegar al santuario de Santa Rosa de Lima, fue recibida por monseñor Polito Rodríguez, arzobispo de la Arquidiócesis de Barquisimeto y el párroco Humberto Tirado, en compañía de sus devotos, para posteriormente escuchar la misa de bienvenida.
En la homilía, Rodríguez pidió a la advocación mariana que siga interviniendo por Venezuela, el estado Lara y todos sus devotos para nunca abandonen la esperanza y siempre se reencuentren con su prójimo.
La eucaristía culminó con cantos y oraciones, mientras los feligreses aprovechaban la cercanía de la virgen para agradecerle por favores concedidos.
Vestido de retorno
Para el regreso de la Divina Pastora, desde la iglesia La Claret, ubicada en el final de la carrera 19, la sagrada imagen de la Divina Pastora fue vestida con un traje de color azul, diseñado por el zuliano Douglas Tapia, quién entregó el vestido en ofrenda.
Por Anderson Piña Pereira @anderpinap
Fotos: @juliocolmenarez05