El ministro iraní de Asuntos Exteriores, Mohamad Yavad Zarif, calificó de “sospechoso” el supuesto ataque a dos barcos, uno de ellos al servicio de un armador japonés, en el mar de Omán, cuya tripulación ya fue rescatada y trasladada a un puerto del sur de Irán.
“Los ataques denunciados contra los petroleros relacionados con Japón ocurrieron mientras el primer ministro (japonés) Shinzo Abe se reunía con el ayatolá Ali Jameneí para mantener conversaciones extensas y amistosas”, escribió en su cuenta oficial de Twitter.
Por ello, y teniendo en cuenta que algunos países acusaron a Irán de un incidente similar ocurrido el mes pasado, Zarif agregó que el término sospechoso se queda corto para “describir lo que ocurrió esta mañana” en el mar de Omán.
El jefe de la diplomacia iraní volvió a insistir en que, en la actual situación de inestabilidad, el foro de diálogo regional propuesto por Irán es “imperativo”.
Abe comenzó ayer una visita histórica de dos días a Irán con el objetivo de rebajar la tensión en Oriente Medio, principalmente entre Teherán y Washington.
En su reunión de ayer con el presidente iraní, Hasan Rohaní, pidió a Irán que tenga “un papel constructivo” para evitar “un choque accidental” en la región.
Los barcos, de bandera de las islas Marshall y de Panamá, resultaron incendiados y los 44 miembros de su tripulación trasladados al puerto iraní de Jask.