El gas en las vías intestinales tiene dos orígenes: el aire que se traga al comer, sobre todo si se hace muy rápido, y la descomposición de la comida no digerida (debido a la escasez o ausencia de ciertas enzimas) por las bacterias en el intestino grueso. Eructar es otra forma en que una parte del aire sale del estómago.
Los gases pueden deberse a distintas afecciones, como el síndrome del intestino irritable que genera una sensación falsa de hinchazón por una sensibilidad al gas. El síndrome de flexión esplénica es otro trastorno crónico que puede ser causado por gas atrapado en el colon. Otros factores que producen gases son la enfermedad de Crohn, cáncer de colon u otras afecciones que producen obstrucción intestinal.
Manzanilla
Beber manzanilla es un método muy eficaz para aliviar diversos trastornos digestivos, incluyendo la indigestión y los gases intestinales. Para preparar una infusión, hierve agua y cuando alcance el punto de ebullición, añade un puñado de hojas y flores secas de manzanilla. Apaga el fuego, tapa, y deja reposar durante un par minutos. Bebe la mezcla tibia después de cada comida.
Menta
El mentol que contiene la menta es clave para acelerar el flujo de los jugos digestivos y activar la bilis. Para combatir los molestos gases o flatulencias, debes beber una infusión después de cada comida. Para prepararla, calienta agua y cuando comience a hervir añade hojas de menta. Apaga el fuego, tapa y deja en reposo durante algunos minutos.
Semillas de hinojo
Gracias a su alto contenido en vitamina C, las semillas de hinojo son capaces de disminuir las bacterias intestinales, favorecer el proceso digestivo y reducir la formación de gases. Para obtener sus beneficios, sólo debes preparar una infusión y beberla a cucharaditas.
Canela
El té de canela es una opción muy común cuando de problemas digestivos se trata. Según la evidencia científica, es útil para combatir las flatulencias o gases estomacales, espasmos musculares y estomacales, o prevenir náuseas y vómitos. Puedes añadir media cucharadita de canela en polvo a una taza de leche tibia, o bien, preparar un infusión que deberás beber después de cada comida.
Jengibre
Una buena idea para evitar los gases es incorporar un poco de jengibre a tu dieta diaria, rallándolo sobre las ensaladas, o bien, masticándolo fresco después de las comidas. También puedes preparar una infusión y beberla para favorecer el procesos digestivo y aliviar posibles malestares.