El gobierno de los Estados Unidos aseguró este lunes 14 de marzo que “por ahora” no está manteniendo contactos ni poniendo en marcha ningún plan para importar petróleo de Venezuela, y confirmó que habló con Colombia para que aumente su suministro de crudo a nivel global.
“No es algo sobre lo que estemos conversando de forma activa por ahora”, dijo la portavoz de la Casa Blanca, Jen Psaki, en su rueda de prensa diaria realizada durante este inicio de semana.
Psaki respondió así a la pregunta de si está descartada la posibilidad de que Estados Unidos relaje sus sanciones petroleras a Venezuela para poder importar más crudo de ese país, una idea que la Casa Blanca se había planteado para estabilizar los precios del petróleo los cuales vienen en aumento en estas últimas semanas.
Esa posibilidad despertó críticas de varios legisladores de ambos partidos en Estados Unidos y también inquietud de aliados de Washington como el presidente de Colombia, Iván Duque.
Después de reunirse el pasado jueves 10 de los corrientes con el presidente estadounidense, Joe Biden, Duque reveló que le había ofrecido a Biden el suministro de más petróleo colombiano para estabilizar los precios de la energía, como alternativa al crudo venezolano.
Preguntada al respecto, Psaki confirmó este lunes que el presidente Joe Biden habló de ese tema con Duque en el contexto de la “seguridad energética global” tras la invasión rusa de Ucrania, pero aseguró no tener más detalles sobre ninguna decisión al respecto.