Después de ceder los primeros dos sets de la final del US Open ante Alexander Zverev en un estadio Arthur Ashe casi vacío, Dominic Thiem paulatinamente volteó el partido para una victoria épica 2-6, 4-6, 6-4, 6-3, 7-6 (6) que precisó de más de cuatro horas para conquistar su primer título de Grand Slam.
El austriaco de 27 años es el primer hombre que gana el abierto estadounidense tras quedar abajo 2-0 en sets en la final desde que Pancho Gonzales lo logró ante Ted Schroeder para coronarse en lo que entonces se denominaba como el Campeonato de Estados Unidos y disputado en Forest Hills, hace 71 años.
Thiem había perdido sus tres finales de Grand Slam previas, al no poder con Rafael Nadal o Novak Djokovic en esas. Esta vez, era el favorito y empezó nervioso. Pero eventualmente encontró el aplomo, mientras que Zverev pasó de seguro y confiado a jugar de manera timorata.
El quinto set fue un pleito de altibajos, al igual que los otros cuatro, con los errores incrementándose ante la tensión y el peso de la historia.
Thiem quebró en el primer juego cuando Zverev ejecutó muy mal un par de derechas.
El alemán de 23 años respondió de inmediato y pegó un grito a todo pulmón, animándose tras una doble falta de Thiem.
Fue el turno de Zverev para apurar al frente, quebrando para la ventaja 5-3, cuando mandó afuera un revés por la paralela.
Pero al disponer de la oportunidad de sentenciar el partido con el saque para la victoria más trascendental de una naciente carrera, Zverev flaqueó y le quebraron el servicio cuando depositó una volea en la red.
Thiem procedió a ganar tres juegos seguidos, con un quiebre que le puso arriba 6-5 para sacar por el partido. Un kinesiólogo apareció para darle tratamiento a Thiem en la pierna derecha en el siguiente cambio de lado. Tampoco pudo de liquidar el duelo y eventualmente necesitó de tres bolas de partidos para acabarlo.
Mientras que esta fue la primera final en un grande de Zverev, el séptimo preclasificado, Thiem salió como favorito tras las derrotas ante Nadal en las finales de Roland Garros en 2018 y 2019, y luego contra Djokovic en el Abierto de Australia, justo antes que la pandemia alterase la vida diaria y forzara una US Open sin público y constantes tests de COVID-19.
Daniel Sosa (@iamdanisosa) con información de AP
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