Carlo Acutis un joven normal con familia, amigos, defectos y virtudes que siempre luchó por tener a Dios en primer lugar. Nació en Londres y creció en Italia, desde pequeño demostró su gran amor por la Virgen María, a quien luego definiría como «la única mujer de su vida», y la eucaristía.
Este amor lo llevó a pasar horas investigando y trabajando, para crear una página web y una exposición con los principales milagros eucarísticos que, hoy todavía sigue siendo visitada por miles de personas de todo el mundo. Y no es para menos, como él decía, “La Eucaristía es mi autopista hacia el cielo”.
El papa Francisco lo declaró venerable en el verano de 2018, señalándolo como un ejemplo para todos los jóvenes en su exhortación tras el sínodo dedicado a ellos, “Christus vivit”.
En ese sentido el papa alaba al nuevo beato que “no cayó en la trampa. Veía a muchos jóvenes que terminan siendo más de lo mismo, corriendo detrás de lo que les imponen los poderosos a través de mecanismos de consumo y atontamiento. De ese modo, no dejan brotar los dones que el Señor les ha dado”. Y efectivamente, Carlo decía refiriéndose a esto que “todos nacen como originales, pero muchos mueren como fotocopias”.
«Era catequista, logró transmitir la fe a los niños, no sólo en la forma clásica de las reuniones, sino que también explotó los medios telemáticos», dijo el cardenal Angelo Becciu, prefecto de la Congregación para las Causas de los Santos de Italia.
Carlo asistía a Misa diaria, rezaba el Rosario y dedicaba un rato de adoración antes o después de la Eucaristía. “No hablo con palabras, solo me recuesto sobre su pecho, como San Juan en la Cena”, así describía su forma de orar.
Ciberapóstol de la Eucaristía
Carlo Acutis con apenas 15 años fue diagnosticado con leucemia, ofreció su sufrimiento a Dios por los demás y murió el 12 de octubre del año 2006, solo días después de ser descubierta su enfermedad.
Su corta vida estuvo dedicada a la tecnología y a su fe; combinando los dos con increíble habilidad.
Tenía un gran amor a la eucaristía y por eso les pidió a sus padres que lo llevaran en peregrinación a los lugares de los milagros eucarísticos; le impactaron tanto que creó un sitio web que promovía milagros eucarísticos en línea.
En su sitio web Carlo le dijo a la gente: “cuanto más recibamos la eucaristía, más seremos como Jesús, de modo que en esta tierra tendremos un anticipo del cielo, de eso se trata de convertirse en santo, convertirse en Jesús”.
“todos somos originales y debemos convertirnos en santos a nuestra manera única, seremos santos a través de la eucaristía, la lectura de la biblia, el rosario, la devoción a la virgen María, le preocupación por los pobres y los necesitados; estos son los elementos que necesitamos en nuestro camino a la santidad, también cuando somos niños y jóvenes”, decía Carlo.
El milagro que lo beatificó
La Iglesia le atribuye un milagro ocurrido en el año 2013, cuando el joven salvó a un niño brasileño «con una rara anormalidad anatómica congénita del páncreas» luego de que este y su familia pidieran su «intercesión».
El pequeño había nacido en 2010 en Campo Grande, con el páncreas prácticamente dividido en dos, por lo que necesitaba una compleja cirugía.
Sin embargo, la intervención nunca se realizó porque logró recuperarse después de una oración especial celebrada por un sacerdote en presencia de una reliquia de Carlo: un trozo de su pijama.
El 12 de octubre de 2010, en la capilla de Nuestra Señora Aparecida, en nuestra parroquia de Campo Grande (Mato Grosso del Sur), en el momento de la bendición con la reliquia, se acercó un niño acompañado por su abuelo.
El niño estaba enfermo de páncreas anular, una enfermedad congénita que se estaba tratando.
Esta enfermedad causaba que el niño vomitara todo el tiempo, lo que lo debilitaba y lo abatía mucho, porque todo lo que comía lo devolvía, incluido el líquido. Ya llevaba una toalla, porque su situación era grave. Cada vez más debilitado, encontraría una muerte segura.
Durante la bendición, el niño le preguntó a su abuelo qué debía pedir y este le dijo que rezara, pidiendo “para dejar de vomitar”, y así sucedió. Cuando llegó el turno del enfermo, tocó la reliquia de Carlo y dijo con voz firme: “dejar de vomitar” y, a partir de entonces, ya no vomitó más, comenta la familia del pequeño.
Cuando en febrero de 2011 se realizaron nuevas pruebas médicas se pudo comprobar que el niño estaba completamente curado.
La Congregación para las Causas de los Santos reconoció esta curación como el milagro necesario para la beatificación de Acutis.
Carlo y sus prodigios
En casa de los Acutis, tenían un empleado hindú llamado Rajesh, con el que Carlo entabló una profunda amistad “hasta el punto de que Rajesh se convirtió y pidió recibir los sacramentos”.
Cuenta Rajesh que “me decía que sería más feliz si me acercaba a Jesús. Pedí el Bautismo cristiano porque él me contagió y cautivó con su profunda fe, su caridad y su pureza. Siempre le consideré como alguien fuera de lo normal, porque un chico tan joven, tan guapo y tan rico normalmente prefiere llevar una vida distinta”.
Carlo, que era hijo único, predijo a su madre que tendría mellizos, a pesar de que estaba por cumplir 40 años y así en el 2010 nacieron sus hermanos, que aunque no lo conocieron viven felices con la idea de tener un hermano santo y seguir su ejemplo.
Además fue capaz de predecir su propia muerte, y reconfortar a su madre anunciándole que ella se convertiría, años más tarde, en madre.
Al ser diagnosticado con leucemia del tipo M3, la más agresiva. Sabía que no había ninguna posibilidad de curación.
Al cruzar la puerta del hospital, Carlo le dijo a su madre: “de aquí ya no salgo”. Más tarde, también les comentó a sus padres: “ofrezco al Señor los sufrimientos que tendré que padecer por el Papa y por la Iglesia católica, para no tener que estar en el Purgatorio y poder ir directo al Cielo”.
Cuando la enfermera le preguntaba cómo se sentía con esos dolores, Carlo respondía: “Bien. Hay gente que sufre mucho más que yo. No despierte a mi madre, que está cansada y se preocuparía más”. Pidió la unción de los enfermos y tres días después del diagnóstico, el 12 de octubre de 2006 falleció en el hospital San Gerardo de Monza, Italia
El misterio de su cuerpo
Contrario a lo que muchos creen, el cuerpo de Carlo Acutis, no está incorrupto. Cuando fue exhumado y se encontró en un estado de Incorruptibilidad cadavérica «bien integrado».
Luego con el propósito de preservar su cuerpo fue sometido a un proceso de embalsamamiento y su rostro fue reconstruido utilizando una máscara de silicona que recreó su apariencia para la posterior exposición.
Esto contribuyó a la confusión, ya que cuando las imágenes del cuerpo con el rostro reconstruido a la perfección fueron difundidas se pensó que su cuerpo se encontró intacto después de catorce años de fallecido.
“Al acto de la exhumación en el cementerio de Asís, ocurrida el 23 de enero de 2019 en vista al traslado al santuario, este fue encontrado en el normal estado de transformación propio de la condición post mortem (…) el cuerpo, si bien transformado, pero con varias partes todavía en su conexión anatómica, fue tratado con técnicas de conservación y de integración normalmente practicadas para exponer con dignidad a la veneración de los fieles los cuerpos de los beatos y de los santos. Una operación que se llevó a cabo con arte y amor. La reconstrucción de la cara con una máscara de silicona fue particularmente exitosa”, escribió el Cardenal Agostino Vallini
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Douleydis Romero
Foto: Vatican News
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