El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, sancionó el jueves 15 de abril a Rusia, por su presunta interferencia en las elecciones presidenciales de 2020 y su supuesto papel en el ciberataque masivo de SolarWinds.
En un comunicado, la Casa Blanca anunció además la expulsión de diez miembros de la misión diplomática rusa en Washington, incluidos integrantes de los servicios de inteligencia.
Durante una llamada con el presidente Vladimir Putin el pasado martes 13 de abril, el presidente Biden, le dijo al líder ruso que Estados Unidos “actuará con firmeza” en defensa de sus intereses nacionales.
En la conversación telefónica Biden, exigió a su homólogo ruso que “rebaje las tensiones” con Ucrania y le expresó su “preocupación” por la movilización militar rusa en la frontera con ese país.
Durante la conversación, Biden también le propuso a Putin mantener “una cumbre en un tercer país” en algún momento de los “próximos meses”, para “conversar sobre todos los temas que enfrentan Estados Unidos y Rusia”.
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