De mi consideración con el debido respeto quiero llamar la atención de dueños y directores de radio en la capital larense, con el objetivo específico de que por favor revisen el contenido de sus respectivas programaciones.
PROPÓSITO: que contribuyamos de manera ética y desprendida al adecentamiento de la radiodifusión en Barquisimeto, otrora cuna de buena radio, de brillantes locutores, periodistas, operadores y técnicos en telecomunicaciones, todos titulares, profesionales en sus respectivas áreas. Hoy esa imagen es otro ¡ producto víctima de la escasez”.
Es necesario que revisen “ la casa por dentro”, porque, fundamentalmente el oyente merece respeto y consideración.
Es irrespetuoso que muchas emisoras se anuncien en primer lugar cuando todos saben que no las escuchan ni los planteros.
Igualmente es irrespetuoso meterle esta mentira al anunciante y a los oyentes.
No es ético ofrecer al anunciante un paquete de diez cuñas y solo le pasan o transmiten seis (6) cuando mucho.
No es ético y además una burla al oyente copiar y pegar las noticias de medios ajenos en internet y anunciarlas como propias en programas autodenominados NOTICIEROS que no tienen el aval de periodista alguno y menos el reconocimiento de nuestro CNP.
El oyente y el anunciante no merecen ser engañados de ninguna manera.
Ya la radio en Barquisimeto, obviamente por negligencia y no querer invertir en la producción profesional de contenidos, solo mira la cantidad, y ante la cualidad y calidad voltea la vista hacia otro lado. Cualquier “ lengua mocha o tartamudo” es colocado ante los micrófonos por los mercantilistas de la radio a leer noticias copiadas pegadas y plagiadas en la radio de esta ciudad crepuscular ( Barquisimeto- Venezuela). Y me disculpan los discapacitados, quienes también merecen respeto y derecho al trabajo, pero lamentablemente los colocan en donde por naturaleza del caso no pueden desempeñarse con eficiencia.
Todo parece indican que a los mercantilistas de la radiodifusión se les paga por un espacio para que permitan que no los escuche nadie; ellos se conforman sólo “facturar”, pues no les interesa facturar decentemente con el respeto al aire para el oyente. Ahora hasta el “charlero con su megáfono graba cuñas para algunas radios, inclusive para políticos.
Las encuestas no confirman: no escuchan esas radios; sus dueños y directores alegan que no creen en las encuestas. Permítanme decirles que yo sí creo en las encuestas (EN LAS ENCUESTAS) aunque debo confesar que no creo en muchas encuestadoras y en quienes las hacen. Pero la encuesta como método de investigación y exploración es creíble, porque es la CIENCIA, y la Ciencia no se discute.
Ante cualquier “ loquete” autodenominado “ gerente de producción “ llega a una radio y monta la programación que a él le provoca , y no la que la audiencia necesita y desea escuchar, previo por supuesto a análisis que se haga de lo que arroje la encuesta, pero creíble no lo que haga el propio director del medio en la Plaza Bolívar.
La radio tiene que ser revisada más pronto que tarde, pues en ocasiones ya ni las cadenas si siquiera el Himno Patrio transmiten, porque la computadora convertida en un robot obsoleto y escondida en un cuarto, no obedece.
Sinceramente
Pedro Luis Gutiérrez
Periodista/ Locutor
CNP: 8544/loc. 7393
Técnico Op. De radiodifusión 6528
Especialista en Estrategia Comunicacional