Jesús Alí Oviedo.- Los artesanos que se esmeran por la creación de piezas originales, que destacan por su técnica, destrezas y prolijidad también son considerados artistas. Venezuela es una tierra de artistas visuales y en esta edición se muestra el trabajo de una mujer creadora de vida a partir de sus manos.
El color es el punto de partida de Omaira Gutiérrez —artista y artesana, de 63 años de edad y oriunda de Maracaibo (estado Zulia) — para crear piezas y esculturas ensambladas en madera o MDF (tablero de fibra de densidad media), donde resaltan tonos cálidos y fríos.
En una parte de sus obras recrea las coloridas casas coloniales de su querida Maracaibo en diferentes tamaños y formatos, en los cuales destacan colores de tonos intensos, el cuidado minucioso de los detalles y la luz.
La fascinación por el color de Omaira viene por su amor a Maracaibo. “La luz en mi ciudad es muy intensa por lo que hay muchos colores vivos. Yo no le tengo miedo al uso de estos, claro, procuro la armonía plástica y el contraste entre los elementos”, detalla.
Desde cuadros y objetos utilitarios como espejos, percheros para llaves, cofres, baúles, piezas con imanes para electrodomésticos, organizadores, cajas para té, chocolates, joyas y botellas, pueden encontrarse en la tienda de Omaira.
‘Retablillo’ es el taller artesanal que fundó la artista hace 35 años en el pueblo de Santa Rosa de Barquisimeto, Lara, luego se trasladó hasta la comunidad de El Manzano (sur de la ciudad).
Tras permanecer más de 15 años en dicha localidad, su creadora decidió volver a su tierra natal, donde estuvo por cinco años. Pero este 2018 regresó a Lara y el pasado mes de octubre reabrió en la calle Araguaney del centro de Agua Viva, poblado del municipio Palavecino, justo en el antiguo local de ‘Hoja de Agua’ (taller de papel artesanal), un espacio acogedor caracterizado por la armonía, la naturaleza y la calidez familiar, que cuenta con un área para la exhibición de sus piezas y de antigüedades.
Una familia de creadores
“Soy de una familia de hacedores, mis hermanos, Luz Marina, Valmore, Roberto, Alicia y
Gladys, también son artesanos. Y esa pasión por la creación la heredamos de nuestra madre quien nos decía: Todo lo que quieran, se puede hacer con las manos”, expresa.
Omaira afirma que siempre se ha definido como una artesana, que no produce trabajos en serie, acota. “Prefiero ser artesana porque diseño y elaboro distinto tipos de piezas originales. Unos dicen que soy artista contemporánea, otros que soy artista naif y algunos que soy una artista popular”, destaca.
Pero no cabe duda, de que su trabajo tiene calidad visual. Precisamente, su talento y pasión le han motivado a ahondar e investigar en las técnicas de las artes visuales de manera autodidacta. “Todo lo que se lo he aprendido a través de la interacción con mis hermanos y por mi deseo de crecer y de hacer mejor mi trabajo”, afirma.
El inicio de la creación y el proceso
La artesana cuenta que comenzó con el diseño de fachadas de las casas pintadas sobre madera. Para este trabajo, destaca que se ha apoyado en su hermano Roberto desde el inicio, quien es carpintero.
Luego de pintar las casas en distintas superficies, como madera, cartón, lienzo y otros materiales, se animó a diseñar esculturas, inicialmente fueron gallos, luego pavos reales y peces, entre otros.
El proceso de creación de una escultura inicia con el diseño en papel, luego la realización de los moldes en cartón, que pasan a la carpintería. Una vez que las piezas están elaboradas en madera o MDF pinta cada parte, finaliza con el ensamblaje y la aplicación de una capa protectora (laqueado). Cada una de estas tiene una base de metal construida por un herrero.
De todas sus propuestas, Omaira indica que los marcos de los espejos representan sus piezas más valiosas. “Estoy conectada con los espejos porque reflejan quienes somos o aquellos que hay en nuestros espacios, además siempre me emociona pintarlos”, señala.
La significación del arte
“La artesanía es mi vida. Yo siento que trabajar con las manos es una forma de canalizar todos las problemáticas del entorno. Mientras estoy trabajando me siento segura y confiada, me siento bien. Y no se trata solo de una seguridad económica si no espiritual”, detalla de manera reflexiva al interrogarle sobre los sentidos que tienen las artesanías en su vida.
Un espacio para las artes
‘Retablillo’ es un lugar destinado para el desarrollo de las artes, con historia y anécdotas, abierto para quienes estén interesados en conocer el trabajo de Omaira. Se encuentra abierto de lunes a sábados de 9:00 de la mañana a 5:00 de la tarde. Además, está ubicado en una zona donde hacen vida otros artistas y artesanos de la región.