Hasta nuestras oficinas de redacción se acercó el profesor Ricardo Rojas, secretario general de Sindicato Único del Magisterio del Estado Lara (Sumalara), filial de la Federación Nacional de Trabajadores del Magisterio (Fetramgisterio), con el objeto de hacer un planteamiento público “a cualquiera de los candidatos que gane la gobernación de esta entidad federal en la elecciones del próximo domingo”.
Explicó Rojas que la situación de todos los educadores estadales –y no solamente de los afiliados al gremio que él representa– “estamos viviendo en una situación de verdadero apremio, penurias y calamidades”.
-Comenzando por nuestros salarios, totalmente devaluados, y que, como ya es públicamente conocido, sencillamente no nos alcanza para nada, en muchos casos incluso ni siquiera para pagar el pasaje de movilización.
-No contamos con beneficios de ningún tipo, empezando porque no disponemos de ningún tipo de servicio médico, pues el del Instituto de Previsión y Asistencia Social del Ministerio de Educación (IPAS-ME), que en algún momento funcionó bastante bien, sencillamente en la práctica ya no existe.
-Y, por si fuera poco, por decreto gubernamental, fuimos despojados de todos los beneficios socio-económicos de que gozábamos en nuestras contrataciones colectivas, como bonos, primas, etc.
-Ahora, imaginémonos si sumamos a todo eso las condiciones laborales en que hemos venido trabajando en los últimos años, con escuelas totalmente deterioradas, falta de agua, baños inservibles, falta de dotación de insumos de mantenimiento, etc., todo lo cual, por cierto, se ha agravado más aún con la llegada de la pandemia del coronavirus.
-En consecuencia, lo que estoy planteando a título personal es que el gobernador que resulte electo en estos comicios, sea quién sea, por favor, se aboque a ir solucionando, de una vez por todas, esa gran cantidad de problemas que afectan a los educadores dependientes del ejecutivo regional.
-Y todo ello en beneficio –expresó finalmente- no solamente de nosotros, sino en beneficio de una educación de calidad, gratuita y laica, como lo pregonó siempre el maestro Luis Beltrán Prieto Figueroa, nuestro guía permanente.
Reinaldo Gómez