La depresión es el trastorno mental más frecuente que, según un panel de expertos, todavía carece de reconocimiento social y gubernamental como una enfermedad que afecta a toda la comunidad y que, por tanto, amerita una inversión “efectiva” que palíe sus efectos y evite casos futuros.
En el foro EFE Fórum Salud “Depresión. Un problema de salud pública en América Latina”, organizado por la Agencia Efe, en colaboración con Janssen, estudiosos en materia sanitaria y económica coincidieron en que los prejuicios representan la primera barrera de esta patología.
Según reseñaron los medios en el debate participaron la doctora Laura Ospina Pinillos, especializada en psiquiatría y profesora adjunta de la Universidad Pontificia Javeriana, y el doctor Gustavo Cabrera, paciente y titular de la Facultad Nacional de Salud Pública ‘Héctor Abad Gómez’ de la Universidad de Antioquia.
Uno de los doctores explicó que en su caso personal como afectado sintió que la depresión es “la lepra del siglo XXI” y pasó “30 años de obscurantismo” ante la falta de apoyos e información.
Datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), establecen que es una dolencia que afecta a más de 300 millones de personas con un impacto económico cercano al billón de dólares.
En Latinoamérica, el 5 % de los adultos sufren depresión.
Con el confinamiento por la pandemia de la Covid-19 los médicos creen que las personas necesitan mayor “acceso a las consultas de tipo psicológico” y, en general, reclamaron “el derecho a ser tratados de forma integral”.
La tristeza prolongada, la apatía, la angustia o la falta de voluntad para realizar tareas cotidianas son algunos de los síntomas de la depresión que, en la mayoría de los casos, genera una pérdida de productividad en la etapa adulta.
En la peor de sus consecuencias puede derivar en suicidio, acto que según datos de la OMS causa una muerte cada 40 segundos en todo el mundo y 38.000 casos anuales en Latinoamérica.
Con información de EFE
Foto: Referencial AP