(AP) — Las empresas eléctricas provinciales de Ecuador iniciaron el martes racionamientos de energía eléctrica de hasta tres horas por día a causa de una sequía extendida y altas temperaturas que han reducido los caudales que abastecen las principales centrales hidroeléctricas.
Los cortes se producirán en la capital, en Guayaquil —en cuyos alrededores está el mayor asentamiento industrial del país— y en las ciudades de Cuenca y Manta, las más pobladas del país.
Desde el fin de semana se han registrado inesperados racionamientos de al menos dos horas en unas 10 provincias, los cuales se conocieron a través de redes sociales.
El Ministerio de Energía indicó en un comunicado difundido la noche del lunes que dispuso los racionamientos temporales para gestionar la demanda a nivel nacional y pidió a la ciudadanía reducir el consumo de energía “en esta semana crítica” en la que se esperan lluvias que podrían reactivar la generación de energía en las principales centrales hidroeléctricas.
La ministra ecuatoriana de Energía, Andrea Arrobo, indicó la semana pasada que al panorama crítico se sumó la decisión de Colombia de no vender energía eléctrica a Ecuador a causa de la sequía en su propio territorio. Ese país dejó de abastecer a Ecuador hace dos semanas.
A fines del año pasado e inicios de 2024 Ecuador registró una serie de racionamientos eléctricos en todo el país de entre dos y tres horas diarias como respuesta a la falta de producción de energía debido a la sequía.
El 23 de febrero las autoridades decretaron el fin de los apagones y no se anunciaron nuevas medidas similares.
Entre las centrales que están con mínimos niveles de caudal están Mazar, Sopladora, Coca Codo y Paute, que producen cerca del 40% de la energía que requiere el país.
De acuerdo con las autoridades, hasta el año pasado Ecuador contaba con una capacidad de producción de energía de 7.074 megavatios, un 73% corresponde a generación hidroeléctrica y el resto a centrales térmicas que funcionan con combustible y a generación solar o eólica, entre otras alternativas.
El consumo promedio del país es de poco más de 4.570 megavatios.