Investigadores en Inglaterra dicen haber obtenido la primera prueba de que un fármaco mejora las posibilidades de sobrevivir al COVID-19. Un esteroide llamado dexametasona redujo las muertes de hasta un tercio de enfermos graves hospitalizados.
Una vez anunciados los resultados, el gobierno británico autorizó inmediatamente el uso de dicho esteroide en todo el Reino Unido para enfermos similares a los que mostraron buenos resultados en el estudio. Los investigadores dijeron que publicarán próximamente los resultados, y varios expertos independientes dijeron que era importante conocer los detalles para saber qué clase efecto tendría la dexametasona y en quién.
“Pero la conclusión general es que se trata de una buena noticia, dijo el doctor Anthony Fauci, el principal especialista estadounidense en enfermedades infecciosas. ”Es una mejora significativa en las opciones terapéuticas disponibles».
El estudio se basa en una prueba amplia y estricta que suministró el medicamento a 2.104 enfermos escogidos al azar, a los que comparó con 4.321 enfermos que recibieron el tratamiento habitual.
Se suministró el medicamento por vía oral o intravenosa. Después de 28 días, el medicamento redujo en un 35% las muertes de enfermos que requirieron tratamiento con respiradores artificiales y en un 20% de los que solo requirieron oxígeno. Aparentemente no ayudó a los enfermos menos graves.
Los investigadores calculan que el medicamento impediría una muerte cada ocho enfermos con respirador y una de cada 25 muertes de enfermos tratados solamente con oxígeno.
“Son resultados importantes”, dijo el doctor Martin Landray, uno de los autores del estudio. “No es una cura, pero sin duda es un gran paso hacia adelante. Una buena noticia es que la droga es ”notablemente barata, quizás 20 o 30 dólares para todo un tratamiento», añadió.
Los esteroides reducen la inflamación que suele producirse en los enfermos de COVID-19 como reacción del sistema inmune al combatir la infección. Esta reacción excesiva lesiona los pulmones y puede ser fatal. La Organización Mundial de la Salud y otros aconsejan no utilizar los esteroides en etapas tempranas de la enfermedad porque pueden impedir la eliminación del virus.
“Al principio uno combate el virus y quiere que el sistema inmune permanezca lo más intacto posible”, dijo Fauci. Pero en estadios avanzados del COVID-19, la batalla contra el virus provoca tanta inflamación que “lesiona más de lo que ayuda”, dijo, y añadió que los resultados de Oxford “coinciden perfectamente” con ese concepto.
“Es un resultado extremadamente positivo”, dijo en un comunicado Peter Horby, de la Universidad de Oxford, uno de los jefes del estudio. “El beneficio de supervivencia es claro y amplio en los enfermos suficientemente graves para requerir el tratamiento con oxígeno, de manera que la dexametasona debe ser desde ahora el tratamiento estándar para estos enfermos. La dexametasona no es cara en la venta al público y se puede utilizar inmediatamente para salvar vidas en todo el mundo”.
Es el mismo estudio que demostró semanas atrás que el fármaco para la malaria hidroxicloroquina no es eficiente contra el coronavirus.
El estudio abarcó a más de 11.000 enfermos en Inglaterra, Escocia, Gales y e Irlanda del Norte a los que se dio el tratamiento estándar o éste más uno de varios tratamientos: la combinación de medicamentos para VIH lopinavir-ritonavir, el antibiótico acitromicina, el esteroide dexametasona, el antiinflamatorio tocilizumab o plasma de convalecientes de COVID-19 que contiene anticuerpos para combatir el virus.
Continúa la investigación con los demás tratamientos, financiada por agencias de salud del gobierno del Reino Unido y donantes privados como la Fundación Bill y Melinda Gates.