El presidente de Ecuador, Lenín Moreno, restableció este martes su Gobierno en la capital, Quito, tras haberlo trasladado temporalmente a la ciudad costera de Guayaquil durante las protestas contra el decreto que eliminaba los subsidios a los combustibles.
Moreno reapareció en el balcón del Palacio de Carondelet, la sede del Gobierno ecuatoriano, ante una multitud de personas que llenaba la Plaza Grande, acompañado de algunos ministros.
El mandatario ondeó una bandera ecuatoriana con la que simbolizó así la vuelta a la normalidad en Quito, pues hasta en la mañana de este martes permanecía cerrada la Plaza Grande y sus accesos estaban custodiados por militares.
Este martes entró precisamente en vigor la derogación del polémico decreto, que estaba dentro de las medidas de austeridad económica emprendidas para recibir un crédito de más de 10.000 millones de dólares, de los que 4.200 proceden del Fondo Monetario Internacional (FMI).
Las protestas dejaron ocho muertos según la Fiscalía, aunque el Gobierno dice que son seis, además de más de 1.500 heridos, entre ellos 435 policías y 1.192 detenidos.