Italia deberá iniciar la desescalada del confinamiento nacional «con gran cautela» y con pruebas continuas a la población para controlar cualquier indicio de un incremento en los contagios por coronavirus, aconsejó hoy el Instituto Superior de Sanidad.
«Tendremos que reorganizar nuestra vida, nuestros hábitos en el transporte, en el trabajo y en las actividades diarias», afirmó el presidente de este instituto, Silvio Brusaferro, en una rueda de prensa.
Por ahora, el Gobierno italiano ha decretado el confinamiento nacional hasta el 3 de mayo para intentar contener el coronavirus, que ha causado ya más de 22.000 fallecidos en el país.
Brusaferro destacó que las personas con síntomas son cada vez menos, a medida que disminuye la curva de transmisiones en todo el país, pero pidió no bajar la guardia y subrayó que el número de infectados varía enormemente entre regiones.
«Será necesario verificar los factores de riesgo dentro del lugar de trabajo y utilizar herramientas como el distanciamiento social» o incluso «barreras físicas», añadió Brusaferro acerca de la etapa posterior.
OTRAS CIFRAS
Sin embargo, las autoridades de salud de esa nación contabilizaron el 16-A 3.786 contagios adicionales de Covid-19 y 525 víctimas mortales a causa de la enfermedad, lo que significa un aumento significativo en las últimas 24 horas, respecto al día anterior.
De esta manera, el total de infectados con coronavirus en el país europeo asciende a 168.941, mientras que 22.170 personas han fallecido hasta la fecha, informa RT.
Italia continúa siendo el segundo país más afectado por la pandemia en cuanto a muertes, después de Estados Unidos (EE.UU.) y el tercero en cantidad de infectados.
Hasta este jueves, 2.936 personas permanecen en internadas en cuidados intensivos, menos que el día anterior. Mientras que el total de recuperados de la enfermedad asciende a 40.164 personas.