La colombiana, quien se encuentra en los Estados Unidos llevando el arte corporal, planea regresar a su país natal para darle inicio a nuevos proyectos, de la mano de Farid Duque, «El Dukke».
Asistir a convenciones internacionales, visitar estudios y experimentar nuevas facetas son algunos de los planes para los próximos meses. A sus seis años de trayectoria, Nataly ha logrado ganarse la admiración de quienes acuden a ella para realizarse algún diseño, debido a las distintas técnicas que caracterizan su trabajo: watercolor, puntillismo, blackwork. Siempre se mantiene a la vanguardia del arte corporal. En una área dominada por el sexo masculino, sabe cómo imponer su propio estilo.
Si algo ha tenido claro desde niña es la pasión por el dibujo y los colores. Así que empezó a relacionarse con artistas hasta poder realizar el primer tatuaje. Desde ese entonces, entendió que la preparación es parte fundamental para llevar el talento a un ámbito profesional. Es por ello que decidió estudiar Diseño Gráfico, una carrera que, aunque no lo es todo en el mundo del tattoo, es un complemento a la hora de crear ideas. En Colombia, se desempeña en el estudio del reconocido tatuador de celebridades, Carlos Angarita, donde forma parte del equipo principal.
A partir de ahora, comienza una etapa artística con la mirada puesta en la proyección e internacionalización, reuniendo todas las habilidades para convertirse en un éxito mundial. Los seguidores y mentores están de acuerdo en algo: ha llegado para revolucionar el género femenino en la industria. Una de las carreras más prometedoras de los próximos años está a punto de despegar.
Nota de prensa: Geraldine González Longet / @geraldinelonget
Fotos cortesía: @naty_fierro_art