Bélgica pasó un susto este jueves en la Eurocopa, cuando se encontraba empatado a uno con Dinamarca, pero Kevin de Bruyne venido de la banca lo salvó y anotó el gol de la diferencia 2-1, durante partido en homenaje a Christian Eriksen en el primer tiempo.
De Bruyne ingresó tras el descanso, de vuelta en una cancha luego de haber sufrido una fractura facial en la final de la Champions League. No tardó en poner su sello con el pase que Thorgan Hazard mandó a las redes a los 55 minutos. Y el volante creativo puso el 2-1 definitivo a los 71 con un disparo rasante desde fuera del área.
Fue el primer partido de Dinamarca desde que Eriksen se derrumbase en el terreno de juego el sábado pasado en el juego contra Finlandia. Los anfitriones fueron una tromba en los primeros compases en un estadio Parken a rabiar. Yussuf Poulsen abrió la cuenta con un disparo pegado al poste cuando apenas habían transcurrido dos minutos.
Los futbolistas de ambos equipos interrumpieron las acciones a los 10 minutos y los 25.000 espectadores se pusieron de pie para un estruendoso aplauso en homenaje a Eriksen, quien luce el número 10 en su camiseta de la selección danesa. Los jugadores se sumaron al aplauso, lo mismo que el árbitro Bjorn Kuipers.
Eriksen permanece en un hospital cercano al estadio tras sufrir un paro cardíaco en el duelo inaugural. La victoria garantizó a Bélgica el pase a octavos de final. Los daneses todavía podrían avanzar si le ganan a Rusia el lunes y Finlandia pierde con Bélgica, de acuerdo con las estadísticas oficiales.
AJS vía AP
Foto: Kevin de Bruyne salvó a Bélgica tras venir de la banca