El gobierno colombiano denunció este jueves la retención “arbitraria” en Venezuela, de tres ciudadanos colombianos que llevaban ayuda humanitaria a indígenas en una zona fronteriza.
La Cancillería dijo que recibió información de la Armada de que «la embarcación con sus tres tripulantes fue retenida por parte de militares venezolanos cerca a su lugar de destino en Puerto Colombia, siendo conducidos a la población venezolana de Maroa».
Ante esa denuncia, el Gobierno colombiano exigió «el respeto a la integridad personal y la inmediata liberación y retorno de los tres ciudadanos colombianos, al tiempo que rechaza de manera categórica este hecho violatorio del derecho a la libre navegación de los ríos comunes, que interrumpió una labor humanitaria en tiempos de pandemia» del coronavirus.
«Los tres ocupantes de la embarcación colombiana, de nombre CEJAL 1, transportaban ayudas humanitarias otorgadas por el Consejo Noruego para Refugiados (73 kits de aseo y 73 mercados) con destino a las comunidades indígenas que habitan en esa zona de frontera», agregó la información.
Ante esto, el Gobierno venezolano contestó en un comunicado que la barca «no disponía de documentación alguna que avalara la carga” que -además de las bolsas de comida, según dice el texto- incluía «38 tambores para transporte de combustibles que ocupaban 80 por ciento de la embarcación”. Para el canciller venezolano, Jorge Arreaza, esto tiene «características delictivas propias del contrabando de combustible”.