Posiciones encontradas se evidenciaron en las redes sociales a raíz de la publicación en la cuenta oficial del fiscal Tarek William Saab sobre la imputación a un individuo por golpear a un vigilante de 72 años de edad.
El hecho ocurrió en Lechería (Anz), donde el sujeto quiso entrar a una farmacia, pero al no traer tapabocas, el trabajador de seguridad no le permitió el acceso, a lo cual el hombre respondió golpeándolo violentamente al punto de caer al piso.
El septuagenario requirió ocho puntos de sutura en su cabeza y 11 en su boca.
Saab, al informar la detención del agresor, detalló que éste será imputado por los delitos de homicidio intencional en grado de frustración, omisión de socorro y resistencia a la autoridad.
Y ahí es donde se activan los comentarios en la red social Twiiter, por cuanto algunos usuarios consideraron que los cargos de homicidio y omisión de socorro no cuadran con lo ocurrido, aun cuando coinciden en afirmar que, ciertamente, el agresor debe ser castigado.
A ellos les responden quienes apoyan los cargos, explicando que sí hay razones para tales cargos en virtud de las condiciones como queda la víctima tras ser golpeado. ¡Sí hay intención!, aseguraban en este grupo.
Lo cierto del caso, y no debemos olvidarlo, es que una cosa es que la fiscalía Impute, pero otra es que los tribunales acepten la acusación. Le corresponde a la defensa del detenido, presentar sus alegatos.