Las reacciones no se han hecho esperar ante el anuncio del presidente Nicolás Maduro de “adelantar la Navidad”, en medio de la pandemia por Covid-19, con la cual se ha empeorado la crisis económica en Venezuela.
A Alberto Perozo, secretario de reclamos de Trabajadores de la Industria Eléctrica del estado Lara, (Sitiel), le parece «un cinismo de quienes tienen el poder político declaren navidades felices cuando la realidad es que cada día, para la mayoría de la población, es más difícil llevan el pan a la mesa», dijo.
Pero además, garantizar educación, salud y vestidos a la familia.
A su juicio, quienes tienen el poder político en el país, deberían empezar por reconocer las «condiciones terribles” en la que viven los venezolanos, consecuencia de un modelo económico fracasado.
Es tan crítica la situación, que es difícil pensar en las fiestas navideñas y reuniones familiares en los actuales momentos.
Por eso, “exigimos que se respete la dignidad del pueblo. Más que un pedazo de pernil, los trabajadores queremos que respeten nuestros derechos fundamentales”.
Se pregunta Perozo, cómo atreverse a hablar de navidades felices cuando al calcular las utilidades, los trabajadores cobrarán, en promedio entre cinco y seis millones de bolívares lo que alcanzará para comer tres días.
Recordó, Perozo que en la cuarta república, que causa resquemor en quienes tienen el poder político, las utilidades eran utilizadas para remodelar la vivienda, cambiar de vehículo o cualquier otra inversión.
Por estas razones, los trabajadores mediante la protesta, como instrumento de lucha, seguiremos en la calle exigiendo nuestros derechos contemplados en la Constitución de la República, manifestó.
Finalmente, el líder sindical enfatizó que la mayoría de los venezolanos quiere vivir en paz y también un cambio político que garantice el desarrollo y bienestar para el país.
@auritarosacastillo.
Foto referencial: archivo EL INFORMADOR VENEZUELA