Este martes 18 de mayo España desplegó al Ejército en la frontera con Marruecos, debido a los miles de migrantes que intentan cruzar nadando o en balsas neumáticas a suelo europeo.
La repentina llegada de migrantes ha agravado la disputa diplomática entre Rabat y Madrid y provocó una crisis humanitaria en Ceuta, un enclave con 85.000 habitantes que está entre el Mar Mediterráneo y Marruecos, del que lo separa una doble cerca de 10 metros (32 pies) de alto.
El presidente del gobierno de España, Pedro Sánchez, canceló un viaje a París, donde debía asistir a una cumbre de ayuda internacional a África, para centrarse en la crisis con Marruecos.
Hasta el martes por la mañana, unas 6.000 personas, de las cuales se cree que 1.500 son adolescentes, habían cruzado la frontera de la ciudad española desde la madrugada del lunes, cuando se registraron las primeras llegadas, explicó el gobierno español.
Los cruces parecen haberse ralentizado desde la llegada de más soldados y policías a la frontera.
“Es una invasión tan fuerte que no somos capaces de calcular el número de personas que han entrado”, dijo Juan Jesús Vivas, presidente de la ciudad autónoma en declaraciones a la emisora de radio Cadena Ser.
“El ejército está en la frontera cumpliendo una función disuasoria, pero hay una gran cantidad de personas en el lado marroquí esperando a entrar», añadió.
Un joven se ahogó el lunes y docenas de personas fueron atendidas por hipotermia. Los adultos que llegan a suelo español están siendo trasladados al estadio de fútbol de la ciudad antes de ser deportados a Marruecos, mientras que los que se considera que son menores son enviados a albergues gestionados por Cruz Roja y otras ONGs./SYGA
Foto: AP