La peregrinación hacia la Meca y Medina, ciudades saudíes, inicio este domingo, guardando estrictas medidad de bioseguridad, con la participación de 60.000 personas.
Antes de la pandemia la procesión reunía a poco más de dos millones de fieles.
Arabia Saudí, que también el año pasado permitió el hach solo a 10.000 residentes en el reino, decidió aumentar el número a 60.000 ante el avance de la vacunación contra la covid-19. Más de 50 % han recibido al menos una dosis.
Los peregrinos empezaron a llegar hoy al valle de Mina, a unos 6 kilómetros del centro de La Meca, y este lunes subirán al monte de Arafat para realizar el principal ritual del hach.
Antes de dirigirse a Mina, los devotos dan siete vueltas de bienvenida alrededor de La Kaaba, el edificio más sagrado para los musulmanes.
Desde el viernes, las autoridades cerraron el acceso a La Meca y solo quienes tienen permiso llegan a cuatro centros de agrupación situdos en las afueras de la ciudad y de ahí son trasladados en pequeños grupos para su alojamiento en los hoteles próximos a la Gran Mezquita.
Infractores serán castigados
El jefe de las fuerzas de seguridad del hach, general Zayed al Tuwan, advirtió de que los infractores serán castigados con multas de hasta 10.000 riales (2.250 euros) y dos semanas de cárcel.
Medidas similares se aplican en Medina, adonde los peregrinos se dirigen para visitar la mezquita del profeta Mahoma tras finalizar los rituales en La Meca.
Con datos de Unión Radio
Foto: Apnews