Brasilia, 18 oct (EFE).- El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, tachó este miércoles de «tragedia injustificable» el ataque al hospital de Gaza, sin atribuir la responsabilidad del mismo a ninguna de las partes del conflicto.
«El ataque al Hospital Bautista de Al Ahli es una tragedia injustificable. Las guerras no tienen ningún sentido. Vidas perdidas para siempre. Hospitales, casas, escuelas, construidos con tanto sacrificio destruidos en instantes», escribió en redes sociales.
El mandatario afirmó, además, que «los inocentes no pueden pagar por la locura de la guerra» y evitó pronunciarse sobre la autoría del ataque que ha dejado casi 500 muertos, objeto de acusaciones cruzadas entre Israel y los grupos islamistas Hamás y Yihad Islámica.
Mientras Lula intenta evitar polémicas, el Partido de los Trabajadores (PT), la formación del mandatario, y la Embajada de Israel en el país suramericano se enzarzaron en una disputa dialéctica.
La dirección del PT aprobó el lunes una resolución en la que condenaba los asesinatos cometidos «tanto por Hamás como por Israel» y acusaba al segundo de perpetrar «un genocidio contra la población de Gaza».
La resolución provocó una dura reacción de la Embajada israelí, que consideró «muy lamentable que un partido que defiende los derechos humanos compare la organización terrorista Hamás (…) con el Gobierno israelí».
«Cualquier persona que piense que el asesinato bárbaro, la violación y la decapitación de personas son una posición política (…) posee una extrema falta de comprensión de la situación actual», decía el comunicado difundido el martes.
El PT, a su vez, tachó de «inaceptable» la respuesta de la Embajada y afirmó, en referencia al bombardeo del hospital, que «quien representa en Brasil a un Gobierno que hizo un ataque de esta naturaleza no tiene autoridad moral para hablar de derechos humanos».
Protestas de ambos bandos
En las principales ciudades brasileñas se han escenificado protestas tanto a favor de Palestina como de Israel. En Río de Janeiro, un millar de personas con banderas blanquiazules de Israel se concentró el 16-Oct frente a la playa Copacabana, para solidarizarse con el Estado judío después del ataque de Hamás.
Ese mismo día, pero en São Paulo, la mayor ciudad de Suramérica, un centenar de personas con kufiyas palestinas a la espalda se manifestó en la Avenida Paulista para denunciar los bombardeos israelíes sobre Gaza y la delicada situación humanitaria que viven sus habitantes.