El científico británico Robin Dunbar planteó a finales del XX, que nuestro desarrollo cerebral limita el número de personas con las que nos relacionamos a 150.
Según NTN24 el académico evaluó el número de 150 a partir de la capacidad para relacionarse de un primate. Estos mostraron que sus conexiones sociales la desarrollan dependiendo del tamaño de su neocórtex, que es la parte asociada a la cognición y el lenguaje, la cual es considerada la zona más moderna del encéfalo. Expresó que datos que obtuvo fueron de 38 primates, convirtiéndose en el “número de Dunbar”.
También propuso que, el tamaño de los grupos humanos reales solo llega a ser de 150 individuos cuando las condiciones en las que se desenvuelve el grupo son muy rigurosas y sus miembros tienen un fuerte incentivo para permanecer juntos.
Por supuesto, esos números realmente representan un rango. Los extrovertidos, según el autor, tienden a tener una red más amplia, aunque con relaciones menos intensas, mientras que los introvertidos se concentran en un grupo más pequeño de contactos muy cercanos.
De acuerdo con su teoría, nuestras relaciones se dividen en 15 buenos amigos, 50 amigos, 150 contactos significativos, 500 conocidos y 1.500 personas que puedes reconocer.
Se podría concluir que tenemos una especie de capital cognitivo más o menos fijo, y que si dedicamos ese capital a relacionarnos con pocas personas, la relación con ellas puede ser muy intensa. Pero si, por nuestra personalidad o por otras circunstancias, tenemos tendencia o necesidad de relacionarnos con muchas personas, entonces no podremos dedicar a cada una de ellas más que una pequeña cantidad de capital cognitivo relacional, según lo reseña ABC.
Francismar Loyo (@francismarloyo99)