En este momento, la Alianza Democrática en todo el país “tiene ya asegurados una cantidad muy cercana a los tres millones de votos en las próximas elecciones parlamentarias, y seguimos sumando votos…”.
Así, tajantemente, lo aseguró Timoteo Zambrano, diputado a la Asamblea Nacional (AN) y líder máximo de Cambiemos-Movimiento Ciudadano, en una rueda de prensa ofrecida en Barquisimeto. Le acompañaban dirigentes regionales de su partido, tales como Iván Barrios, José Ramón Arrieche y Maylín Quiñones.
El líder nacional visitó la capital larense, con el objeto de proceder a juramentar los testigos de mesa que su organización política aportará al padrón electoral de la antes citada coalición política.
Esta coalición está integrada por Cambiemos, Avanzada Progresista, Acción Democrática, Copei y El Cambio.
También fue en asegurar que el gobierno no cuenta en la actualidad “ni siquiera con el respaldo del 20 por ciento del electorado, pues tiene el 84 por ciento en contra”.
Zambrano aseveró que “si el gobierno pierde las elecciones, como sabemos que las va a perder, va a reconocer su derrota, y no me cabe ninguna duda de eso”.
Mediciones después del simulacro
En cuanto al tema de las cifras por él antes ofrecidas, explicó Zambrano que tal deducción deviene de “lo que pudimos apreciar en el último simulacro electoral de este 16 de noviembre pasado, pero también lo apreciamos en las mediciones numéricas que hemos mandado a hacer”.
El líder visitante enfocó numerosos aspectos relacionados con el acontecer político nacional y regional.
Por supuesto, no dejó de soltar algunas descargas contra el sector oposicionista que no participa en estas elecciones parlamentarias.
Comenzó por recordar “la paliza que se le dio al gobierno en las parlamentarias del 2.015, incluso en condiciones menos favorables que las de ahora”.
-Pero –aseveró, entre otras afirmaciones-, después de haber logrado esa inmensa acumulación de fuerzas en el pueblo soberano, resulta que se cometieron luego una serie de errores tras errores.
-Y esos errores comenzaron porque resulta que los líderes de los para ese momento cuatro principales partidos con presencia en la AN querían ser presidentes.
-Y otro grave y gran error fue el de haberle advertido al gobierno que “lo vamos a sacar en seis meses…”
“Por supuesto, su tú le dices eso al gobierno, o a alguien, el gobierno o ese alguien se va a poner en guardia y se va a atrincherar”.
Luego, manifestó que, “por si fuera poco, se pasó a un interinato presidencial jurado en una plaza pública”.
Aseguró que el venidero 6 de diciembre concluirá esa dualidad, que ha dañado severamente al país, porque solamente ha servido para que una claque, una minoría, pueda acceder de manera fácil a millones de dólares no muy bien ganados”.
-Y, de paso, han designado a una serie de embajadores que lo que han hecho es darse la buena vida con los dineros de los venezolanos, en grandes hoteles y en grandes casas, con buenos carros, y que ahora son lo que yo llamo “políticos de caviar…”
-Para colmo de males, se alejaron de la vía constitucional desde hace ya varios años y se fueron por los atajos aventureros de pretender que las soluciones lleguen, o del exterior o de la violencia.
Mejores condiciones
También explicó abundantemente Zambrano por qué el sector opositor que representa ha decidido participar en el actual proceso electoral, algunas de cuyas razones ya han sido ampliamente repetidas por ese liderazgo opositor.
Entre otras cosas, dijo que, “para empezar, nosotros siempre hemos sido partidarios de la vía constitucional para salir de este gobierno”.
-En segundo lugar, para nosotros, no hay otra vía constitucional para cambiar a un gobierno, que el voto.
-Y en tercer lugar, en este momento, las condiciones electorales son mucho mejores que las que regían durante la campaña electoral del 2.015, cuando, a través de la Mesa de Unidad Democrática, ganamos por paliza la AN.
Obviamente, el líder de Cambiemos ofreció una serie de argumentos para esta última aseveración, entre ellas la de que las recientemente adquiridas máquinas de votación de ahora no permiten, bajo ninguna circunstancia, algún tipo de manejo fraudulento de los resultados.
Y también dijo que, además, en el nuevo Consejo Nacional Electoral, dos de los cinco integrantes del mismo fueron propuestos por la oposición, y la oposición misma tiene ahora una representación en la Junta Electoral de ese CNE.
Defendió la presencia opositora en la llamada Mesa de Diálogo con el gobierno, y afirmó que, “gracias a ella, fue que se lograron varios interesantes acuerdos”.
Entre tales acuerdos, mencionó el de que los parlamentarios del gobierno retornasen a la AN; el de que se hubiese podido designar al antes referido CNE, y el de que este CNE permanezca en funciones hasta que cese este proceso electoral parlamentario.
-Incluso, ya el gobierno aceptó que un nuevo CNE deberá ser designado prontamente por la AN resultante del proceso de votación del venidero 6 de diciembre.
También descartó que pudiese haber alguna influencia o manipulación militar en los resultados de los comicios parlamentarios, a pesar de que el propio ministro del Defensa aseguró hace pocas semanas que “la oposición venezolana jamás volverá al poder”, y de que todos los castrenses dicen públicamente ser “profundamente chavistas”.
Indultos
-Por supuesto –siguió diciendo-, ya le hemos planteado formalmente al presidente de la república que, después del 6 de diciembre, tiene que haber un indulto para todos los presos políticos del país…
-Repito: Para todos. Y por muchas razones. Sobre todo porque, entre otras cosas, la democracia es generosidad
-Además, tener a esos políticos presos allí no conduce a nada, como no sea a más división y a más enfrentamientos.
Así mismo aseveró que su partido nació “para luchar por los derechos de las minorías venezolanas, y para igualmente luchar por que no haya conflictos entre venezolanos”.
-Porque es bueno que se sepa –dijo luego- que nuestra lucha no va a cesar el 6 de diciembre, sino que, después de las elecciones parlamentarias, vendrán otras luchas…
-Luchas que deben llevarnos –dijo finalmente- a un proceso de reinstitucionalización del país, con la designación de los altos funcionarios de la nación, tales como el fiscal general, el contralor general, el procurador general, etc.
Reinaldo Gómez