Las calles de Argentina se desbordaron en miles de personas por el triunfo de la Albiceleste en el Mundial de Catar, al derrotar a Francia 4-2 en ronda de penales el domingo 18 de diciembre.
Después de sufrir lo indecible hasta el último momento, los argentinos dieron rienda suelta a una alegría desbordante el domingo 18, con el triunfo de su selección nacional ante la de Francia en el partido decisivo de la Copa del Mundo en Medio Oriente.
Argentina por fin se alzó con el tercer título de su historia en la Copa del Mundo, luego de imponerse en la tanda de penales. La coronación anterior se remontaba a 1986, en México.
Millones de argentinos lloraron, gritaron y se fundieron en interminables abrazos en sus casas, en bares y en plazas de decenas de ciudades en las que se congregaron para ver la final de infarto en grandes pantallas, sintiendo que tocaban el cielo con las manos en algunos momentos o que todas las ilusiones se derrumbaban en otros.
Argentina dilapidó una ventaja de 2-0 en el tiempo regular. Recuperó la delantera en la prórroga, pero el tercer gol del astro francés Kylian Mbappé en el encuentro obligó a definir desde los 11 pasos.
Gonzalo Montiel convirtió el penal decisivo en la tanda tras el empate 3-3 al cabo de 120 minutos de lo que fue quizá la final más electrizante de la historia.
MUY FELIZ
“Estoy muy feliz, lo merecíamos de verdad, este equipo sufrió bastante, pero se fue reponiendo”, dijo a The Associated Press Josefina Villalba, de 55 años. La mujer, ataviada con los colores celeste y blanco de Argentina, era una de las fanáticas que se había acercado a una plaza capitalina para ver la final.
Tras esperar 36 largos años, la Albiceleste se alzó de nuevo con el cetro mundialista borrando de un plumazo los sinsabores económicos de los últimos tiempos. El primer título lo había logrado en 1978, pero había perdido las finales de 1930, 1990 y 2014 —esta última ya con Lionel Messi como su astro.
La elogiada actuación de la selección a lo largo del Mundial de Qatar unió a la población con una alegría poco común en un país afectado desde hace años por una de las peores tasas de inflación del mundo y por una creciente pobreza.
PRESIDENTE FELICITÓ A LA SELECCIÓN
El presidente argentino Alberto Fernández felicitó en su cuenta de Twitter al plantel dirigido por Lionel Scaloni. “Son el ejemplo de que no debemos bajar los brazos. Que tenemos un gran pueblo y un gran futuro», manifestó.
Fernández también agradeció las palabras de elogio del presidente electo de Brasil, Luiz Inácio “Lula” Da Silva, sobre el “gran juego” de Messi y Angel Di María, al señalar que «si gana Argentina gana Latinoamérica”.
El presidente Chileno Gabriel Boric, quien en Twitter había alentado a la selección del país vecino cuando se decidía la suerte del partido, mandó un “abrazo gigante a los hermanos argentinos” y afirmó que “su alegría cruza la Cordillera” de los Andes tras el final del encuentro.
20 AÑOS DE HEGEMONÍA EUROPEA
La Albiceleste puso fin a 20 años de hegemonía europea en mundiales. “La satisfacción es muy grande”, dijo Fabio Villani, de 45 años, otro de los participantes en el festejo en la plaza capitalina que iba vestido con una camiseta de la selección nacional. “En el primer tiempo Argentina fue superior, manejó la pelota, pero sabemos lo que es Francia y los jugadores que tienen y terminó siendo un partido muy parejo».
Hubo más de un seguidor de la selección que se mostró convencido de que el astro futbolístico Diego Maradona, fallecido hace dos años, fue el artífice del triunfo argentino.
«DIEGO MIRA TODO DESDE EL CIELO»
“El Diego está mirando todo desde el cielo; no iba a querer que Argentina pierda. ¡El primer Mundial sin él y lo ganamos! Diego está presente siempre, Diego eterno”, dijo Javier López, de 18 años, que llevaba puesta una camiseta de Argentina con el nombre de la leyenda del fútbol que alzó la Copa del Mundo en el Estadio Azteca.
Facundo Alonso, de 26 años, dijo que el plantel dirigido por Lionel Scaloni “transmite algo muy distinto a los planteles de antes, que no sentían la camiseta, mientras que estos jugadores dejan todo en cada partido, ponen todo».
Bajo un sol deslumbrante, López y Alonso se unieron poco después a decenas de miles de personas que celebraron en la plaza de Buenos Aires donde se alza el monumento del Obelisco.
Muchas de ellas habían viajado en metro hasta ese céntrico lugar en vagones colmados donde coreaban la canción “Muchachos”, que se ha hecho famosa entre la hinchada argentina de Qatar en este mundial y hace alusión a las ganas de hacerse con el trofeo mundial.
TODOS AHORA SATISFECHOS
“Muchachos, ahora nos volvimos a ilusionar, quiero ganar la tercera, quiero ser campeón mundial”, cantaban a voz en grito los pasajeros mientras daban saltos.
En la plaza donde se encuentra el Obelisco, la canción volvió a escucharse, lo mismo que el nombre de Messi, el capitán de la selección argentina, quien marcó un tanto en el tiempo regular, uno en la prórroga y un penal en la tanda.
Familias integradas por padres que llevaban a sus hijos en hombros y portaban la bandera argentina celebraron hasta el cansancio. Ancianos, algunos trasladados en sillas de ruedas, también se sumaron al festejo en el que los participantes tocaron cornetas y tambores.
Las calles de otras ciudades argentinas se colmaron de personas. Muchas armaban círculos para celebrar, otras se trasladaban en autos adornados con la bandera argentina mientras tocaban la bocina para celebrar el triunfo. De los balcones de las casas también colgaban banderas del país.
La expectación para el encuentro de este domingo era incluso mayor que en el certamen de hace ocho años en Brasil, cuando llegó la derrota ante Alemania en tiempo extra.
AP