Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) informaron este miércoles de que han llevado a cabo un ataque contra una red de túneles subterránea en el sur de Líbano que conducía a un cuartel general del partido-milicia chií libanés Hezbolá, desde donde el grupo habría dirigido «muchos» ataques contra Israel.
La operación, que estuvo a cargo de la Brigada 188 de las FDI, ha servido para localizar armamento, sistemas de observación y otros equipos militares en las instalaciones que Hezbolá utilizaba «para dirigir actividades terroristas en la zona», según han detallado las propias autoridades militares israelíes en su página web.
Asimismo, en las inmediaciones del citado cuartel general se habían dispuesto varios almacenes de armamento, uno de los cuales se encontraba en el interior de una mezquita. Allí las tropas israelíes han localizado «cientos de explosivos, armas de fuego, granadas y otros equipos militares».
Israel y Hezbolá acordaron hace ya varias semanas un pacto de alto el fuego para el cese de hostilidades y la retirada de ambos del sur de Líbano, donde el Ejército regular libanés deberá tomar posiciones para garantizar la seguridad del Estado israelí. Sin embargo, ambos bandos se han acusado de incumplir el acuerdo.
Las hostilidades entre Hezbolá e Israel se recrudecieron después de los ataque de Hamás del 7 de octubre de 2023 –que dejaron casi 1.200 muertos y 240 rehenes– y la posterior ofensiva israelí sobre la Franja de Gaza, que este mismo lunes ha superado ya los 45.000 fallecidos y ronda los 107.000 heridos.
El balance de víctimas por el conflicto en Líbano es notablemente menor, pues las autoridades libanesas han informado de cerca de 4.000 fallecidos. En ambos conflictos, Israel ha logrado eliminar a gran parte de la cúpula política y militar de Hamás y Hezbolá, como los palestinos Yahya Sinwar e Ismail Haniye, o el libanés Hasán Nasralá.