Los centros carcelarios son campos de concentración, con mejores condiciones que los de la Segunda Guerra Mundial, expresó el Padre Alfonso Maldonado de la Vicaria de los Derecho Humanos.
Precisó que no existe hacinamiento, lo cual tiene años y es más notable en los actuales momentos, e ha agudizado.
Dijo que las comisarías no son centro de detención, sino que ahora son prisión permanente, sin ninguna condición de vida.
Igualmente abordó el caso de las muertes por tuberculosis en los lugares de detención. Donde indica que el año pasado se presentó una situación similar de fallecimientos por enfermedades.
La ciudadanía no debe ser indiferente ante una masacre silenciada que viene ocurriendo en las cárceles venezolanas.
Responsabilizó a las autoridades de la situación extremadamente grave e instó a respetar los derechos humanos.
No debe temblar el gobierno cuando se presente Michelle Bachelet de la Comisión de Derechos Humanos de la ONU.
Lázaro Aranguren