La muerte de un ser querido es uno de los momentos más difíciles para el ser humano, no sólo por la partida física si no por todo el ajetreo que trae consigo la partida. Desde el papeleo para poder retirar el cadáver hasta los servicios funerarios. Es por ello que las familias ante la escases de recursos se las han ingeniado para dar cristiana sepultura a los fallecidos.
Arturo Medina, presidente de la Cámara de funerarias de Lara, explicó a EL INFORMADOR, que el sector funerario se ha visto muy afectado, pero “evidentemente la peor parte siempre la llevan los familiares”.
El costo de un servicio funerario completo está alrededor de 350$, lo que significa un precio que no todos pueden costear, esto con un ataúd de metal pero si el material es MDF el precio disminuye a 180$.
Por esto muchos han tomado la decisión de fabricar sus propios ataúdes y sólo contratar el servicio coche e implementos velatorios, o solo los implementos y el ataúd y el traslado lo hacen por su cuenta.
En la actualidad es común ver camiones trasladando ataúdes, esto se debe al alto costo de los servicios, pues sólo el traslado puede llegar a costar dos millones de bolívares, por eso la solución para muchos es pedir a algún conocido con carro el favor.
Medina señala que estos transportes informales de difuntos son un riesgo, pues no cumplen con las medidas de seguridad.
Douleydis Romero
Foto: Julio Colmenares