La Defensoría del Pueblo pidió este martes al Gobierno de Perú que convoque a la ayuda internacional para atender a los más de 50.000 damnificados por las intensas lluvias, que han provocado la destrucción de unas 20.000 casas y cientos de kilómetros de vías, especialmente en la costa norte del país.
La entidad recordó, en una nota de prensa, que el Plan Nacional de Operaciones de Emergencia (PNOE) establece que, ante la declaratoria de estado de emergencia nacional, debe intervenir el gobierno nacional con los recursos nacionales disponibles, incluso, con el apoyo de la ayuda internacional.
Recordó que las regiones norteñas de Tumbes, Piura y Lambayeque están en estado de emergencia desde el 27 de marzo pasado, cuando se agudizaron las lluvias, y que «es imprescindible solicitar el apoyo internacional».
En tal sentido, indicó que el Instituto Nacional de Defensa Civil (Indeci) debe comunicar al Ministerio de Relaciones Exteriores las necesidades de asistencia humanitaria para que pueda hacer el llamado internacional.
Sin embargo, la Defensoría constató que Indeci aún se encuentra «en proceso de consolidación» de información para hacer el requerimiento de asistencia humanitaria internacional.
La adjunta de la Defensoría para la Administración Estatal, Eugenia Fernán-Zegarra, informó que, en base a la evaluación de daños reportados a nivel nacional al 58 %, existen 51.387 damnificados, 300.437 afectados, 85 fallecidos y 14 desaparecidos.
Respecto a las viviendas, hay 6.639 casas destruidas, 13.132 inhabitables y 119.293 afectadas.
Específicamente en las regiones de Tumbes, Piura y Lambayeque, hay 27.556 personas damnificadas y 148.867 afectadas, así como 10.656 viviendas destruidas o inhabitables.