Francia necesitó un gol de Antoine Griezmann en el segundo tiempo para evitar la mayor sorpresa en lo que va de la Eurocopa.
Hungría, frente a una multitud entusiasta, empató 1-1 el sábado con el campeón del mundo.
Griezmann anotó a los 66 minutos para enfriar los ánimos de los aficionados húngaros, que alentaron constantemente a su equipo a lo largo del partido por el Grupo F.
Fue el 38vo gol de Griezmann para Francia y lo festejó con un poco de baile frente a los aficionados franceses.
La Arena Puskas de Budapest, con capacidad para 67.215 espectadores, es el único estadio de la Euro 2020 con aforo completo, y el clima fue algo para recordar.
“Es la primera vez con el estadio lleno, es distinto de lo que uno está acostumbrado”, dijo Griezmann. “No se escucha nada. No podíamos escucharnos en el campo. Pero es un gran placer volver a jugar delante de los fanáticos”.
Los fanáticos húngaros enloquecieron cuando Attila Fiola abrió el marcador para los locales.
Tras recibir un pase de cabeza de Roland Sallai por el carril izquierdo, Fola entró al área, esquivó al defensor Raphael Varane y remató bajo cerca del palo derecho.
Se encendieron bengalas y el portero húngaro Peter Gulacsi tuvo que despejar las serpentinas que cayeron en su área.
Kylian Mbappe y Karim Benzema derrocharon buenas oportunidades antes del gol de Hungría.
“Deberíamos haber estado en ventaja. No basta dadas nuestras expectativas, pero así es el fútbol”, dijo el director técnico francés Didier Deschamps. “Anotaron en su única oportunidad. Considerando el contexto, aceptamos el punto”.
Dada la calidad de sus adversarios, el empate tuvo sabor a victoria para Hungría, y Gulacsi agitó los puños cuando el público les brindó una tremenda ovación.
“Hoy logramos un poco de gloria”, dijo el técnico de Hungría, Marco Rossi, por intermedio de un traductor. “Mañana, la vida continuará como siempre”.
Los jugadores húngaros se alinearon frente a sus aficionados detrás de un arco y colocaron la mano sobre el corazón mientras la multitud cantaba.
“Los fanáticos húngaros no tienen igual. Tenemos unos fanáticos únicos”, dijo Rossi. “Por eso nos esforzamos tanto para complacerlos”.
Muchos aficionados ondeaban la bandera nacional verde, blanca y roja, y otros llevaban camisetas negras con la inscripción Magyaroszag (Hungría). Detrás de un arco un grupo se quitó las camisetas bajo el sol brillante.
El equipo francés también atrajo a unos cuantos seguidores, unos 5.700 según la UEFA.
Los ánimos se caldearon cuando algunos sectores de la tribuna abuchearon el himno nacional francés, La Marsellesa.
Francia tuvo bastantes oportunidades de hacerlos callar durante la primera mitad.
Pero Mbappe, desmarcado, desvió un cabezazo tras un centro de Lucas Digne a los 18 minutos. A continuación, Benzema recibió un hábil taco de Mbappe y remató desviado desde el punto del penal.
Benzema aún no ha anotado en el torneo, como no lo hizo en Euro 2008 y Euro 2012. No jugó Euro 2016.
“Como delantero, sabe lo que la gente espera de él”, dijo Deschamps. “Pero lo principal es que mantenga su confianza y que yo siga creyendo en él”.
Mbappe tampoco ha anotado en este torneo. A ambos les anularon un gol por fuera de juego en el 1-0 contra Alemania el martes.
El empate da un punto a Hungría, que enfrenta a Alemania el miércoles en Munich. El doble campeón Francia tiene cuatro puntos y permanecerá en Budapest para enfrentar al campeón defensor Portugal.
Deschamps podría tener un problema de lesión para ese partido.
El suplente Ousmane Dembele, que estrelló un remate contra un poste a poco de ingresar en el segundo tiempo, salió cerca del final, aparentemente con una rodilla lesionada. AP