Bravos de Margarita y Águilas del Zulia, dirigidos por Luis Dorante y Marco Davalillo, quieren tener un buen comienzo en la temporada 2022-2023 de la Liga Venezolana de Béisbol Profesional, que arranca el sábado 22 de octubre en cuatro plazas.
Bravos es el único equipo de la LVBP que no tiene un campeonato. Águilas acumula 6 junto a Cardenales de Lara. Los que más han ganado son Leones del Caracas (20), Navegantes del Magallanes (13) y Tigres de Aragua (10). Después siguen Tiburones de La Guaira (7) y Caribes de Anzoátegui (4).
Bravos ha tenido tres campañas fuera su casa el Estadio Nueva Esparta en Porlamar, que ocurre de nuevo en esta estación y comparte sede con Tiburones en el Fórum de La Guaira en Macuto, aunque inició su pretemporada en el Centro de Desarrollo Deportivo de Empresas Polar de San Joaquín en Carabobo. Desde la 2018-2019 no avanza a los playoffs. Ahora aspira a estar en esa instancia en este campeonato.
Águilas en los últimos días recibió las incorporacioes de siete jugadores, entre cuatro lanzadores, dos receptores y un jardinero en el Luis Aparicio «El Grande» de Maracaibo. El careta José Herrera que debutó este año en las Grandes Ligas con Cascabeles de Arizona arribó junto al también catcher José Briceño y el guardabosque Jackson Chouiro, además de los pítchers Mario Sánchez, José “Chino” Flores, Carlos Betancourt y Francisco Carrillo, todos a las órdenes de Davalillo el hijo de Pompeyo y sorbrino de Vitico, figuras en el béisbol local. La idea es iniciar con el pie derecho y no bajar la guardia en en ningún momento.
Propia
Coaches pendiente del entrenamiento de los peloteros de Bravos