Más de 20 personas resultaron heridas y más mil fueron detenidas en las protestas que se generaron en India tras la polémica enmienda legal que busca dar la ciudadanía a inmigrantes de países vecinos, pero que excluye a los musulmanes.
Las protestas, que reunieron a miles de personas, se celebraron pese a la prohibición de las autoridades a manifestarse y a los cortes de los servicios de comunicación en varias partes de la capital.
En Mangaluru (Karnataka), en el sur de la India, dos personas fueron gravemente heridas durante las manifestaciones y se encuentran hospitalizadas en cuidados intensivos, según informó el comisionado de policía P.S. Harsha.
Asimismo, en Lucknow, capital del estado norteño de Uttar Pradesh, 55 personas fueron arrestadas por su supuesta participación en las protestas y los enfrentamientos con las autoridades, según relató a los medios el director general de la Policía estatal, O.P. Singh.
Aunque medios locales informaron de la muerte de al menos una persona en esa protesta, el jefe policial dijo no poder confirmar si el suceso estaba directamente relacionado con las marchas.