Es mejor cambiar bolívares en dólares e importar más barato, porque lo que se produce es más costoso en el país, dijo el economista Víctor Álvarez.
El especialista explicó que la sincronización de la depreciación del bolívar con la inflación es lo que permtirá a las familias obtener suficientes bolívares por cada dólar que reciben en remesas o remuneraciones. «El dólar frenado es pan hoy y habre para mañana».
Pero a la vez aclaró que cuando se devalúa o deprecia el bolívar, ocurre todo lo contrario: Los productos importados se encarecen. Esto estimula la producción nacional y respalda la competitividad cambiaria de las exportaciones no petroleras que recibirán más bolívares por cada dólar exportado.
Indicó que actualmente en Venezuela no hay un tipo de cambio fijo sino uno flexible. La flotación del precio de la divisa está influida por las intervenciones del Banco Central de Venezuela, que suele quemar reservas internacionales para frenar el alza del dólar. Aclaró que el tipo de cambio publicado por el BCV es el promedio ponderado de las operaciones de las mesas de cambio de las instituciones bancarias.
Se recuerda que la devaluación es una medida administrativa que, bajo el régimen de cambio fijo, tomaban conjuntamente el Ministerio de Finanzas y el BCV para modificar el precio fijo del dólar, mientras que ahora la apreciación o depreciación son propias de la dinámica de un tipo de cambio flexible, que surge de las operaciones cambiarias de las instituciones bancarias, las que reciben las adjudicaciones de divisas que semanalmente hace el BCV para frenar la elevación del dólar.
Con información de Banca y Negocios