El estadounidense LeBron James de 37 años rebasó a su compatriota Karl Malone en el segundo lugar de los mayores anotadores en la historia en el baloncesto de la NBA en Estados Unidos, al llegar a 36.947 sobre 36.928, mientras sólo lo supera el también norteamericano Kareem Abdul-Jabbar con 38.387.
Pero los Lakers de los Ángeles dilapidaron otra actuación espectacular de su astro y sufrieron una nueva derrota el sábado 19 de marzo ante los Wizards de Washington 127-119, que remontaron un déficit de 16 puntos. James no pudo apreciar debidamente su hito, después del fracaso de su equipo.
Los Lakers volvieron a fracasar. “Evidentemente habrá un día en que podré mirar hacia atrás este momento. Pero por ahora, no puedo separar de esto la sensación que tengo”, explicó. “Tuvimos una gran oportunidad de tomar algo de ritmo en la campaña”.
James sumó 38 tantos mientras que Russell Westbrook agregó 22 en su regreso a Washington. Pero una alineación sin tanta estatura no pudo frenar a Kristaps Porzingis. El letón de siete pies y tres pulgadas (2,20 metros de estatura) anotó 27, incluidos 16 en el último periodo.
Porzingis atinó un triple con 38 segundos por jugar, para colocar a los Wizards arriba por seis unidades. James no pudo responder en el otro extremo de la cancha. Washington aventajó a los Lakers por 34 puntos contra 20 en el último cuarto.
EL RÉCORD A SU ALCANCE
El récord parece al alcance de James, si es que se mantiene saludable. “No me permito pensar en eso. Siempre he jugado este deporte así, durante años, y estas cosas simplemente han ido ocurriendo de manera orgánica, al jugar de la forma correcta”, comentó. “Espero lograr eso en algún momento de mi carrera, pero no pensaré mucho en ello”.
Luego de conseguir seis tantos en el primer periodo, la estelar figura brilló en el segundo, con un desempeño que incluyó una volcada y tres triples. El último de esos encestes de tres puntos le permitió alcanzar a Malone. Lo rebasó con 5:20 minutos restantes en el tercer periodo, mediante una bandeja.
Vía AP
Foto: LeBron James siempre protagonista aunque su equipo pierda