El diplomático Elliott Abrams, exrepresentante especial del gobierno de Donald Trump para Venezuela, sugirió este viernes 19 de julio que Estados Unidos debería ofrecer una amnistía a Nicolás Maduro, para que reconozca el triunfo del candidato presidencial unitario, Edmundo González Urrutia, en las elecciones presidenciales del 28 de julio.
En un artículo de opinión, publicado en el portal del Consejo de Relaciones Exteriores, Abrams recordó que «en 1988, Estados Unidos entabló negociaciones con el entonces dictador de Panamá, Manuel Noriega. Noriega había sido acusado en Miami de tráfico de drogas y lo queríamos fuera de su cargo y fuera de Panamá».
En ese momento, Abrams era subsecretario de Estado para América Latina en la administración Reagan.
«Para sacar a Noriega y devolverle a Panamá la democracia, le ofrecimos un trato: Anularíamos la acusación si se iba», rememoró.
En esa oportunidad, Noriega «negoció durante un tiempo, pero al final se negó» a aceptar el trato, así que decidió quedarse en el poder hasta que fue depuesto en 1990, para ser posteriormente juzgado y sentenciado a 40 años de prisión.
Hoy, el destino de otro dictador está en juego: Nicolás Maduro en Venezuela. Allí se celebrarán elecciones presidenciales el 28 de julio y todas las encuestas muestran que Maduro perderá claramente frente al candidato de la oposición democrática, Edmundo González. La cuestión hoy es si Maduro permitirá una elección libre y si aceptará dejar el poder», apuntó Abrams.
En este sentido, el diplomático analizó que, «si existe alguna posibilidad de que Maduro permita y luego acepte el resultado de unas elecciones libres, sería como parte de una negociación que le otorgue algún tipo de amnistía».
Abrams destacó que «cada transición latinoamericana a la democracia que puedo recordar, y hubo muchas en los años de Reagan y Bush, implicó algún tipo de amnistía. Los generales que dirigían las dictaduras militares latinoamericanas lo exigieron y los partidos democráticos estaban dispuestos a concederlo, prefiriendo el retorno a la democracia a la insistencia en la justicia».
Por ello, apuntó que, «si Maduro va a contemplar la posibilidad de dejar el cargo, se debe ofrecer algún acuerdo».
Aunque reconoce que una amnistía puede ser injusta para las víctimas, resalta que «es un ingrediente necesario para poner fin a la dictadura y hacer la transición a la democracia en muchos casos».
«Las amnistías siempre son parte de las transiciones negociadas, y tendrían que serlo también en Venezuela», remarcó.
Fuente: Versión Final
Gráfica: Referencial
RG