Al compás de un penal de Lionel Messi, el Barcelona abrumó el martes 5-1 al club húngaro Ferencváros en su primer partido por la Liga de Campeones desde la debacle 8-2 ante el Bayern Múnich en la anterior edición.
Ansu Fati, Philippe Coutinho, Pedri y Ousmane Dembélé también remecieron las redes para que el Barça arrancase su andadura en el Grupo G con una victoria aplastante.
“Que haya gente arriba y que dé este rendimiento es lo mejor”, se entusiasmó el técnico azulgrana Ronald Koeman. «Si había dudas con el gol ha quedado claro esta noche. Todos los jugadores han demostrado su calidad y han marcado goles. Hemos visto un gran Messi que ha dado dos asistencias y nos vamos contentos a casa”.
Ihor Kharatin anotó el gol de Ferencváros al ejecutar un penal que se señaló tras la roja directa al zaguero Gerard Piqué a 20 minutos del final. La expulsión le impedirá al veterano central jugar contra la Juventus en el próximo partido.
En el otro partido de la llave, el delantero Álvaro Morata firmó un doblete y la Juve sacó una victoria 2-0 de visita al Dínamo de Kiev.
El Barça, tratando de conquistar su primer título de la Champions desde 2015, fue vapuleado por el Bayern en agosto en los cuartos de final del pasado torneo. Esa derrota coronó la primera temporada sin títulos del club catalán desde 2007-08, amén de provocar un abortado intento de Messi de marcharse.
Jugar sin Cristiano Ronaldo no fue un problema para la Juve. Morata abrió el marcador justo después de la reanudación y sentenció a los 84 minutos para que los Bianconeri se embolsaran sus primeros tres puntos.
Cristiano Ronaldo fue descartado tras arrojar positivo en una prueba de coronavirus la semana pasada.
La pandemia de coronavirus he hecho que la mayor parte de los partidos de la fase de grupos se disputan sin público o con un puñado. Pero se permitió el ingreso de 20.000 espectadores al compromiso del campeón de Italia en Kiev.
También fue el primer partido del técnico juventino Andre Pirlo al mando del club en la Champions.
La Juve logró romper el candado defensivo de su anfitrión ucraniana en el primer minuto de la segunda parte. Aaron Ramsey acomodó el balón con un taconazo a Dejan Kulusevski, cuyo remate fue repelido por el arquero Heorhiy Bushchan, pero el español Morata capitalizó el rebote.
Morata, quien llegó a Turín tras ser cedido a préstamo por el Atlético de Madrid el mes pasado, aumentó a seis minutos del final al cabecear un centro del colombiano Juan Guillermo Cuadrado.
MAN UNITED NOQUEA OTRA VEZ AL PSG
Marcus Rashford volvió a ser la pesadilla del Paris Saint-Germain.
El delantero inglés anotó en la agonía para darle al United la victoria 2-1 en su visita a la capital francesa.
Hace dos temporadas, el United eliminó dramáticamente al PSG para avanzar a los cuartos de final del certamen. Con enorme temple, Rashford facturó un penal en los descuentos para sellar la victoria 3-1 en París tras una derrota 2-0 en Manchester.
Esta vez, Rashford anotó a los 87 minutos bajo la lluvia en el Parque de los Príncipes. Dominó un pase del suplente Paul Pogba, se quitó fácilmente la marca de un rival y batió al arquero Keylor Navas con un disparo rasante desde el borde del área.
LAZIO PISA FUERTE
Por primera vez en la fase de grupos de la Champions en 13 años, la Lazio se exhibió. Con un par de goles madrugadores, el club romano despachó 3-1 al visitante Borussia Dortmund en el Grupo F.
Ciro Immobile, máximo goleador de Europa la pasada temporada, abrió la cuenta a los seis minutos y el arquero del Dortmund Marwin Hitz cometió un autogol a los 26 cuando desvió un remate con su cabeza.
Erling Haaland descontó para el Dortmund a los 71, pero Jean-Daniel Akpa-Akpro reestableció la ventaja de dos goles de la Lazio cinco minutos después.
CHELSEA NO PUEDE CON SEVILLA
Después de gastar 300 millones de dólares en el verano, Chelsea pudo reunir a su seis fichajes. No pudieron domar al Sevilla.
El club español, vigente campeón de la Liga Europa, se llevó un empate en la visita a Londres por el Grupo E. Fue el primer partido en el que el club inglés no vence la valla rival desde que Frank Lampard asumió como técnico en 2019.
Por lo menos, Lampard sacó como consuelo que Chelsea fue fiable en la retaguardia, gracias a la presencia del central brasileño Thiago Silva y el arquero Edouard Mendy — dos de los nuevos fichajes.
Durante un tramo de la segunda parte, Timo Werner, Kai Havertz, el suplente Hakim Ziyech y Ben Chilwell — las otras cuatro caras adquisiciones — coincidieron en el campo de Stamford Bridge. Pero el Sevilla supo resistir en un partido de escasas ocasiones.