“Lo menos privado en este mundo es la vida privada de los famosos”… J.V.
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Tómalo en serio o échalo a chiste, pero no podrás ocular nada.
Lo quieras o no, te enojes o no, es imposible tener vida privada si te llamas, Babe Ruth, Héctor Espino, Lou Gehrig, Luis Aparicio, Derek Jeter, Jackie Róbinson, Omar Vizquel, Ty Cobb, Roberto Clemente, David Concepción, Fernando Valenzuela, Manny Mota, José Altuve, Ferguson Jenkins, Miguel Cabrera, Martín Dihigo o Dennis Martínez.
Ruth no pudo evitar que se publicara lo de su vida infantil de delincuente; de Espino se supo que destrozó un bate contra un dugout, porque había dejado esa noche siete hombres en bases; Gehrig encontraba muy extrañas todas las demás ciudades, porque antes de ser bigleaguer, nunca había salido de Nueva York; Aparicio fue rechazado por el servicio militar obligatorio porque tenía los pies planos; Jeter y su hermanita, Sharlee, tenían que firmar con su padre, Sánderson Charles Jeter, de puño y letra, un convenio, acerca de lo que tenían que hacer y lo que no debían hacer durante cada año.
Jackie lloró más de una vez por los insultos de peloteros y fanáticos que oía en los estadios; Vizquel debe aceptar que millones de personas quieran saber más de la supuesta violencia doméstica contra su esposa Blanca; Cobb, con todo y su carácter agresivo, toleró que los fanáticos quisieran saber cómo y por qué, justo cuando iba por primera vez a los entrenamientos, en 1905, su mamá mató a tiros a su papá; Clemente aceptó que era altanero, mal críado, para con algunos estadounidenses blancos.
Concepción no puede negar que antes de comprar su extraordinaria finca, proyectaba montar una distribución de licores, idea que le quitó su esposa; Valenzuela fue muy regañado por su novia (hoy día su esposa), porque en lo mejor de sus días de lanzador, se dejó retratar desnudo, fotos que fueron publicadas internacionalmente… Manny Mota no puede negar que cobraba 100 dólares a periodistas de habla hispana, por concederles entrevistas; José Altuve cuenta cómo fue rechazado por varios scouts, alegando que era muy pequeño para jugar en Grandes Ligas; Jenkins no puede ocular que fue juzgado y sentenciado en Montreal, por tráfico de drogas.
Cabrera acepta que una vez, a comienzos de su carrera, fue acusado de violencia doméstica; cuando era mánager de los Leones del Caracas (1952-´53), Dihigo intentó agredir a un joven periodista en el dugout del equipo. El masajista, Jesús Rodil, quien había sido boxeador, lo evitó… Dennis nunca ocultó que tuvo graves problemas de alcoholismo. Los superó y fue mejor lanzador después.
ATENCIÓN.- En google, puedes leer el archivo de “Juan Vené en la Pelota”, en “el deporte vuelve a unirnos”.
Gracias a la vida que me ha dado tanto, incluso un lector como tú.
@juanvene5