La fuerte demanda de bienes duraderos en los Estados Unidos, consecuencia del aumento del ahorro en las familias por las políticas de estímulo fiscal y de la reducción del gasto en servicios a raíz de la pandemia, es la principal causa detrás de la elevada inflación en el país, la más alta en casi cuarenta años.
Pese a que la subida de los precios responde a múltiples factores, muchos de ellos entrelazados, los economistas consultados por Efe coincidieron en señalar que el principal detonante es la demanda de bienes por parte de los consumidores, que a su vez repercute en la crisis de suministros y la escasez de oferta y mano de obra.
«Estados Unidos adoptó la respuesta fiscal más drástica del mundo y está viviendo una dura inflación acorde con ella», dijo en una entrevista con Efe el profesor de Economía de la Universidad de Duke Connel Fudlenkamn.
Según el economista, las generosas ayudas otorgadas por las administraciones del expresidente Donald Trump (2017-2021) y del mandatario actual, Joe Biden, a familias, empresas y desempleados han servido para aliviar las dificultades de mucha gente y han permitido también a muchos acumular ahorros que ahora están gastando.
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