La detención de los dirigentes Henry Alviarez y Dignora Hernández, del partido político Vente Venezuela, señalados de un supuesto plan para generar violencia en el país, generó del gobierno de diferentes países, entre éstos Estados Unidos, Argentina y Uruguay, quienes pidieron su liberación y el cese de la persecución política. Paraguay también emitió un comunicado al respecto.
“El gobierno de la República Argentina condena firmemente y expresa su absoluto repudio a la detención arbitraria por parte de las autoridades venezolanas de Henry Alviarez y Dignora Hernández, dirigentes de Vente Venezuela y la emisión de órdenes de detención contra otros dirigentes de esa agrupación política», dijeron en un comunicado.
En contraste, el ministro de Relaciones Exteriores, Yván Gil, acusó de «nazi» al gobierno de Milei, «No nos sorprende que la cancillería de un gobierno de corte nazi, como el de Milei, responsable de la mayor mutilación de derechos de su pueblo desde la época de las atroces dictaduras, pretenda hoy convertirse en defensor y cómplice de fascistas»,ereseña Tal Cual.
“Inconsistente con el acuerdo de Barbados»
El subsecretario de Estado para el hemisferio occidental de Estados Unidos, Brian Nichols, también cuestionó las detenciones lo cual considera “inconsistente con los compromisos del acuerdo de Barbados, pero no sofocarán las aspiraciones democráticas del pueblo venezolano».
«Condenamos las detenciones arbitrarias y las órdenes de arresto emitidas hoy contra miembros de la oposición democrática en Venezuela», escribió en su cuenta X, el funcionario estadounidense.
Gil también respondió a Estados Unidos (EEUU), acusándolo de ser «cómplice» de los intentos de magnicidio y ataques «armados» a instalaciones en el país.
Al tiempo, emplazó a Nichols a informarse sobre las investigaciones que lleva a cabo la Fiscalía. «¡Evite enlodarse más”, aseveró.
En la misma línea, el viceministro para América Latina de la Cancillería, Rander Peña, acusó al gobierno paraguayo de pretender ser juez y fiscal en el asunto. A su juicio, es una cortina de humo para evitar hablar de la profunda crisis de corrupción en la que está inmerso ese Gobierno, escribió en sus redes sociales.
Previamente, el gobierno de Luis Lacalle Pou publicó un comunicado en el que señaló que «los acontecimientos de las últimas horas confirman el deterioro progresivo de la situación política de Venezuela».
Para el Estado uruguayo en Venezuela existe una escalada que corrobora el alejamiento definitivo de los Acuerdos de Barbados por parte del gobierno venezolano, dijo.