En las afueras de la embajada de Venezuela en Santiago de Chile acampan casi 600 venezolanos, quienes tras verse afectados por la crisis generada por la pandemia de COVID-19, solicitan ser repatriados.
El último vuelo entre Santiago y Caracas tuvo lugar el pasado 5 de mayo y trasladó a 250 personas a sus hogares.
Dos semanas, pero 15 días después la calle de la embajada venezolana en Santiago se ha convertido en un campamento.
Las oficinas consulares venezolanas de la capital chilena están vacías y los afectados denuncian que no existe información oficial del Gobierno venezolano.
GESTIONES DIPLOMÁTICAS
El canciller chileno, Teodoro Ribera, dijo a la prensa que han «buscado con las autoridades consulares de Venezuela que haya alguna salida» para los ciudadanos venezolanos, y están viendo la posibilidad de que «algún avión que viaje por esa zona» pueda facilitar su retorno.
«Esperamos que (las autoridades venezolanas) nos respondan positivamente y de esa manera poner fin a una situación social agobiante y que nos preocupa», agregó el ministro chileno.
Foto: vía Unión Radio