Las estaciones de servicio permanecen abarrotadas de zulianos que esperan lograr abastecer sus vehículos luego de dos e incluso tres días en cola. El suministro de agua potable es irregular en todo el estado, e incluso algunos desde hace meses como en la urbanización Las Leonas, del municipio Santa Rita, no reciben ni una gota. El transporte público desapareció casi en su totalidad y los vecinos queman los desechos ante la inexistencia del aseo urbano.
Ante ello, es para Juan Pablo Guanipa, gobernador legítimo del estado Zulia, “más que pertinente” que la comisionada para los Derechos Humanos de la Organización de Naciones Unidas (ONU), Michelle Bachelet, se dirija hasta el estado Zulia, a propósito de la visita a Venezuela que realizará desde este 19 de junio hasta el 21 de junio.
“Si la comisionada Bachelet quiere comprender la magnitud de la tragedia humanitaria de nuestro país, la Emergencia Humanitaria Compleja que sufre Venezuela, debería visitar a nuestro estado Zulia. Recorriendo cualquier barrio de Maracaibo tendrá una radiografía verdadera de lo que sufre este país. Si visita Ciudad Ojeda, Cabimas o Santa Rita, verá cómo lo que fue una zona petrolera pujante está hoy destrozada por un sistema destructivo. Si escucha lo que se sufre en Machiques, en La Villa, sabrá cuánto mal se ha hecho”.
El gobernador legítimo realizó un recorrido por las estaciones de servicio, confirmando cómo los zulianos desde que sale el sol hasta que se oculta, permanecen haciendo largas colas para poder surtir de combustible. “¿Es humano que permanezca una familia bajo este sol durante días enteros solo para poder echar gasolina, que además están regulando a solo 20 litros? Ya el zuliano no dormía por el tema eléctrico; comenzó a restringirse el baño por la escasez de agua y nos convirtieron en el primer estado en desnutrición infantil, las epidemias están a la orden del día y en los hospitales además de escasear cualquier insumo y personal médico, no hay ni siquiera electricidad”.
Por ello Guanipa destacó que el tema eléctrico sigue siendo un asunto neurálgico, que pone en riesgo la vida de los zulianos. “Además del criminal racionamiento que aplican, del que no informan con veracidad a la colectividad, los zulianos están a diario a expensas de una cantidad interminable de bajones. Esto ocurre en hospitales, ambulatorios, centros educativos. La actividad comercial se ha visto mermada. Juegan a la desaparición del Zulia y así continúan con todo el país” argumentó. N/P