Dinamarca finalmente tiene un motivo para celebrar en la Eurocopa.
Andreas Christensen y Joakim Maehle anotaron en el tramo final del encuentro para darle al conjunto danés un triunfo el lunes 4-1 sobre Rusia y un lugar en los octavos de final.
Dinamarca terminó en el segundo puesto del Grupo B luego de que Bélgica superó 2-0 a Finlandia en San Petersburgo.
Después de que Christian Eriksen se desvaneció poco antes del descanso en el debut y dos derrotas subsecuentes, los jugadores de Dinamarca celebraron frente a sus ruidosos y extasiados simpatizantes en el estadio Parken al término del tercer y último partido en casa del torneo.
Y, considerando los infortunios previos del equipo, tal vez fue lo más apropiado que recibieran un gran golpe de suerte en esta ocasión. Yussuf Poulsen puso el 2-0 a los 59 minutos después de que Roman Zobnin intentó enviarle un pase a su arquero, y en su lugar habilitó al atacante danés, quien empujó el esférico ante el marco vacío.
Eso le dio a Dinamarca una enorme ventaja, pero Artem Dzyuba achicó la diferencia al marcar el 2-1 para Rusia con un penal.
Sin embargo, Christensen anotó con un remate desde fuera del área a los 79 minutos y Maehle sentenció al culminar un contragolpe a los 82 para sentenciar el encuentro.
Maehle se dirigió directamente a la cámara de televisión para levantar los 10 dedos — el número que porta Eriksen en la selección.
Mikkel Damsgaard puso a Dinamarca al frente en la primera mitad con un espectacular disparo desde fuera del área. AP