Julio Gutiérrez, vicepresidente del Colegio de Ingenieros del estado Lara, considera que Hidrolara no posee la capacidad técnica, operativa ni financiera para atender los requerimientos del servicio.
Situación que afecta a casi dos millones y medio de habitantes en Barquisimeto y Cabudare, lo cual representa 75% de la población larense.
«No hay soluciones al problema de suministro e agua en lo inmediato ni a largo plazo. El sistema de distribución está anarquizado y politizado, abandonaron las maniobras realizadas por empresas privadas», sentenció.
Asegura que, actualmente, no hay posibilidad de optimizar en 100% el suministro de agua potable, porque las demanda se sobrepasa la oferta de la hidrológica.
Gutiérrez se pregunta “cómo una cuyos accionistas son las alcaldías y el gobierno regional está en quiebra”.
Desde 2018 carece de recurso humano y financiero, consecuencia de la eliminación de las tarifas por decisión del Gobierno nacional. Considedera que para que Hidrolara sea eficiente, las tarifas del servicio debe cubrir 80% de sus costos operativos.
Hasta 2017, Hidrolara era la única hidrológica del país que no dejaba de recaudar por la prestación del servicio. Con la llegada de Carmen Meléndez a la Gobernación se abandonó la autonomía financiera de la empresa regional, manifestó.
77 Embalses en 10 años
Durante el período 1959 -1999 se construyeron en Venezuela 77 embalses de los 95 existentes, entre ellos de agua para la generación hidroeléctrica y el consumo humano.
En la década del 1990, en el segundo gobierno de Rafael Caldera, desaparece el INOS y se crean las empresas hidrológicas regionales, Hidroven y sus filiales en los estados.
En su opinión, fue un paso agigantado en la descentralización de los servicios de agua potable y descarga de las aguas servidas.
Sin embargo, apartir de 2005 “el régimen socialista, que no es más que populista, comenzó a congelar las tarifas.
«En 2018 se implementó el sistema socialista sustentado en lo político, se aplicaron políticas erradas en materia hídrica, sin las inversiones necesarias», cuestionó.
Este gobierno socialista no ha podido construir un embalse motivado, por las deficiencias del ingreso fiscal por la renta petrolera, expresó.
En el gobierno del presidente Rafael Caldera se dejaron en construcción tres embalses: Caruachi, en el estado Bolívar, El Diluvio en Zulia y el Sistema Hidráulico Yacambú Quíbor en Lara. De estos solo se concluyeron dos, aun en Lara esperamos por Yacambú.
«Tapan deficiencias»
“Jamás en la historia de Lara y el país se había paralizado la distribución del sistema de agua potable porque caigan algunas lluvias en la cabecera del Alto Tocuyo».
A su juicio, «tapan la ineficiencia, Hidrolara no tenía la capacidad técnica operativa para mantener el suficiente material y los químicos necesarios para potabilizar el agua».
@auritarosacastillo
Foto referencial, archivo El Informador