La expresidenta interina de Bolivia, Jeanine Áñez, pidió una audiencia con la Alta Comisionada de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, para obtener su libertad y defenderse de las acusaciones de terrorismo, sedición y conspiración que le atribuye el Ministerio Público del país.
“Solicito respetuosa y encarecidamente una audiencia para que mi hija, Carolina Ribera Áñez, participe en representación mía, toda vez que me encuentro privada de libertad en ciudad de La Paz, por una decisión política del actual presidente de Estado, Luis Arce”, dice la exmandataria en una carta que replicó en sus redes sociales y en la que reclama un “debido proceso”.
Áñez argumenta que no le han probado hasta ahora las acusaciones que en su opinión tienen móviles políticos. El Ministerio Público acopia pruebas y tiene seis meses para respaldar la acusación para el inicio de un posible juicio.
Áñez es investigada por hechos antes de su asunción por lo que no tendrá un juicio como exmandataria.
La misiva surge en momentos de fuertes pugnas entre el gobierno, el oficialista Movimiento al Socialismo (MAS) que lidera el expresidente Evo Morales, con la minoritaria oposición política, sobre la crisis que precipitó la renuncia de éste en noviembre de 2019 tras un mes de protestas desde las elecciones denunciadas de fraudulentas y en las que el político buscaba un cuarto mandato consecutivo./SYGA
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