Dificultades en la movilización vehicular, transporte público minimizado, vías cerradas y buena parte del comercio clausurado, es el escenario que se observa en diferentes puntos de Bogotá con ocasión del paro nacional liderado por estudiantes, sindicatos, organizaciones sociales y sectores de la oposición contra políticas del Gobierno de Iván Duque.
Los manifestantes rechazan una iniciativa de reforma pensional que, sostienen, busca aumentar la edad de jubilación, fijada hoy en 57 años para las mujeres y en 62 para los hombres. También rerchazan la intención de precarizar de las condiciones laborales para los jóvenes.
No hay reportes oficiales de hechos violentos, pero en las redes sociales se reportan enfrentamientos en algunos puntos de la ciudad colombiana (como en el sur) entre ciudadanos y agentes del Escuadrón Móvil Antidisturbios (ESMAD) de la Policía, un sofisticado sistema en pleno estreno pero que los manifestantes reclaman desmontar.
GOBIERNO GARANTIZA SEGURIDAD
El presidente de Colombia, Iván Duque, aseguró que su gobierno garantizará el «orden» del país en la multitudinaria manifestación.
Sostiene, y de hecho así ha ocurrudo, que los cuerpos de seguridad estarán presentes en la actividad para la «tranquilidad» de la convocatoria.
ONU PREOCUPADA
La ONU expresó su preocupación por el aumento de militares en las ciudades de Colombia previo a la marcha.
La oficina de Naciones Unidas además señaló “con preocupación” la expedición de “varios decretos, circulares e instructivos” que permiten a las autoridades locales declarar toques de queda y contar con apoyo militar en caso de desmanes.
La organización llamó la atención también por mensajes “de procedencia no identificada” que “estigmatizan la protesta social” y otros que “llaman al uso de la violencia” en las movilizaciones.
«Los Estados deben limitar y condicionar al máximo el uso de las fuerzas militares para el control de disturbios internos», indicó en un comunicado.